México.- Es una situación muy extraña el caso de los cisnes en Eslovaquia, ya que cientos de ellos se están drogando en los campos de amapolas de ese país, incluso, ya se volvieron tan adictos que están perdiendo su capacidad para poder volar

Es más, fueron los mismos agricultores quienes han pedido ayuda a las autoridades para reubicarlos y que pasen por un proceso de ‘rehabilitación’.

Decenas de cisnes han caído en adicción luego de consumir frecuentemente amapolas en Eslovaquia, hecho que las mantiene todo el día en los campos del país, negándose a abandonar el lugar.

Los agricultores se encuentran preocupados por múltiples factores, además, que sus campos están siendo destruidos, los cisnes se han vuelto drogadictos, no pueden volar y se está afectando intoxicando que puede atentar a su propia vida.

El extraño caso de los cisnes en Eslovaquia: cientos de ellos se están drogando en los campos de amapolas. Se volvieron tan adictos que perdieron su capacidad para poder volar

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— Alerta Mundial (@AlertaMundial2) June 16, 2023

¿Qué harías si un día te encontraras con que tu campo de flores sufrió una invasión de cientos de cisnes que se volvieron adictos al opio? Eso es lo que les pasó a los agricultores de Kormano, un municipio de Eslovaquia, que desde febrero vienen teniendo que lidiar con una parva de aves que no pueden volar por los efectos narcóticos de la planta.

Los cisnes llegaron atraídos por los charcos de agua que se forman en los campos de amapola, una planta de la que se extraen sustancias opiáceas como la morfina, la codeína, el opio y la heroína. Sin saberlo, empezaron a comer desde las flores hasta las raíces, provocando que se intoxicaran y presentaran síntomas como somnolencia, falta de coordinación y estreñimiento.

Los agricultores se dieron cuenta de que los cisnes se habían vuelto adictos al opio cuando vieron que no podían levantar el vuelo y que seguían regresando a los campos a pesar de los intentos por ahuyentarlos. Algunos incluso murieron por sobredosis. Los científicos que analizaron a las aves confirmaron que habían desarrollado una dependencia a la droga.

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