El PSG, propiedad del fondo soberano catarí, tiene intención de participar en la licitación para la explotación del recinto, levantado para el Mundial de 1998, 

y valorado en unos 600 millones de euros.

 

Cabe mencionar que el actual contrato de explotación acaba en julio de 2025.

 

Un estadio de mayor capacidad, de hasta 80 mil plazas, frente a las 47 mil del Parque de los Príncipes, donde la afición ahora se llena casi en cada partido, es la idea que mantienen sus propietarios.

 

El Estado francés, propietario del Estadio de Francia, no se opone a su venta, mientras que el PSG no logra que el Ayuntamiento de París, propietario del Parque de los Príncipes, les venda su actual sede.

 

Por su parte, la alcaldesa, Anne Hidalgo, dio un portazo hace unas semanas, lo que cerró las ambiciones cataríes, que aspiraban a comprarlo para lanzar una gran renovación que les permitiera llegar a los 58 mil asiento.

 

Para el club, quedarse en el Parque de los Príncipes, su recinto histórico, sigue siendo la prioridad, pero no al precio de renunciar a importantes ingresos por venta de entradas, lo que dificulta su competitividad con otros clubes del continente, aseguró el diario L’Équipe.

 

Así mismo, el periódico indica que el interés del PSG por el Estadio de Francia puede ser también una manera de presionar al Ayuntamiento de París para que flexibilice su postura sobre el Parque de los Príncipes.

 

 

Gianni Infantino, presidente de la FIFA, mostró al presidente francés, Emmanuel Macron, su voluntad de hacerse con el imponente recinto situado en el municipio de Saint-Denis, al norte de la capital.

 

El Estadio de Francia, recinto habitual de las selecciones francesas de fútbol y rugby, ha sido el escenario de la final del Mundial de 1998, de la Eurocopa de 2016, del Mundial de rugby de 2007, del de Atletismo de 2003 o de la Liga de Campeones de 2000, 2006 y 2022.

 

Esta última se saldó con importantes incidentes en sus aledaños donde los aficionados del Real Madrid y del Liverpool denunciaron agresiones, lo que empañó la reputación del lugar.

 

Antes de convertirse en el estadio olímpico de los Juegos de París, albergará la final del Mundial de rugby que organiza Francia este año.

 

Foto: Marketing registrado

LSM