• Nación

Ser periodista en tiempos de la 4T

  • Municipios Puebla
Ser periodista en tiempos de la 4T significa ser ninguneado, vapuleado, amenazado, calumniado, señalado, ofendido, denigrado, llegando —en algunas ocasiones— a ser asesinado

“Lo que importa más nunca debe de estar a merced de lo que importa menos.”

GOETHE

“Cuando todos los odios han salido a la luz, todas las reconciliaciones son falsas.”

ANÓNIMO

Doce periodistas asesinados en México en lo que va del año. Frédéric Vacheron, representante de la UNESCO en nuestro país, ha comunicado que nuestra nación tiene la cifra más alta de periodistas asesinados en el mundo. ¡En el mundo!

El país más peligroso del orbe para realizar la actividad periodística o, lo que es parte de ello, practicar la libre expresión a través de la prensa. Organismos como Reporteros sin Fronteras, Human Right Watch, Artículo 19, la Sociedad Interamericana de Prensa, el Comité de Proyección a los Periodistas y la ONU han dado a conocer cifras sobre la violencia ejercida en México en contra de la prensa, sea esta nacional o internacional. El gobierno de Estados Unidos y el Parlamento Europeo han señalado lo peligroso que es ejercer dicha profesión en nuestro país.

En el país de los otros datos, no obstante, el subsecretario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Ricardo Mejía Berdeja, espetó desde la mañanera (30 junio 2022) que en este año se han registrado solo 10 y no 12 homicidios de periodistas en México. ¿La razón? Para el lopezobradorismo, ser considerado como periodista, requiere serlo de profesión y no nada más desempeñarse como tal. Así la triste maroma —se me ocurren otros sustantivos que no voy a utilizar aquí por respeto a los lectores— de un gobierno que busca pretextos inútiles en lugar de buscar soluciones y parar esta masacre.

Sesenta y un periodistas asesinados en lo que va de este sexenio (ver lista abajo) no pueden ser pasados por alto simplemente porque dejan mal parado al presidente AMLO.

Sé que muchos dirán que en México sí hay libertad de expresión dado que comentaristas, columnistas, reporteros, periodistas de investigación, líneas editoriales pueden decir lo que sea y no hay censura gubernamental directa. Pero ante el número de amenazas, de muertes y de presiones (que el gobierno tiene la responsabilidad de impedir), así como la diametral fuerza de las mañaneras si se le compara a la del ciudadano común, esta libertad de expresión es de sumo frágil. En el caso de algunos periodistas poco conocidos, ella desaparece cuando se les mata.

En otras palabras, podrán decir lo que quieran en la autodenominada Cuarta Transformación, pero la libertad de expresión no está garantizada cuando se atacan y se matan periodistas. No existe cuando, desde el atril presidencial, se utiliza toda la fuerza de la investidura presidencial —que es mucha y es dispar si se le compara con la de reporteros, comentaristas y articulistas— para denostar a quienes tienen como único instrumento su pluma o un medio de comunicación. Recordemos cuando el mismo López Obrador en el 2019 se dirigió a la prensa: “Si se pasan, ya saben lo que les sucede”. Por algunos tomado como un dislate, por otros como una velada amenaza… En el espíritu y carácter de AMLO no existe la mesura, la prudencia, el autocontrol. Prefiere, como niño malcriado, practicar eso de “mi pecho no es bodega”.

Actividad predilecta —no profesión— de López Obrador que ejercita todas la mañaneras a sabiendas de que estas críticas a la prensa se repiten ad nauseam ¡en los propios medios de comunicación!, mientras sus corifeos y el crimen organizado —que, aceptémoslo, está a servicio del primer mandatario— ahondan los ataques.

La violencia SIEMPRE inicia de forma verbal. Y en México, actualmente, a los periodistas más conocidos se les calumnia y presiona en las mañaneras, mientras que a los menos conocidos, a los reporteros locales, no pocas veces se les amenaza y mata sin ningún empacho.

Esta semana tocó a Carlos Alazraki ser víctima de la calumnia y de un profundo enojo por parte de López Obrador. Una violencia que es dispar pues proviene de Palacio Nacional (el presidente y quienes lo defienden lo saben MUY bien, así sea que miren hacia otro lado). Una que va más allá de lo verbal para vulnerar al comunicador y a toda una comunidad que fue diezmada en el holocausto de Adolf Hitler. Comparar a Alazraki con el pensamiento de Hitler, no solo es ignorancia, es ánimo de menospreciar a la historia de la humanidad y a todos los que fueron asesinados tan solo por ser judíos.
 

El odio en nuestra nación hoy lo encabeza López Obrador, de eso no cabe la menor duda. Y ese odio es replicado por esbirros como es el caso de Cuitláhuac García, el indefendible gobernador de Veracruz. Ante el asesinato de Yeseni Mollinedo y Sheila Johana García dijo que la seguridad de los periodistas “no correspondía al gobierno” (sic, 13 mayo 2022).

Doce periodistas asesinados en seis meses. Asesinados a tiros, algunos acompañados de sus familias o de otros periodistas. En promedio uno cada quince días.

La censura que se da de la forma más cruel y cruenta posible: silenciar a quienes investigan casos de violencia, de corrupción, de narcotráfico, de impunidad, entre muchos otros.

Este sexenio ha sido en el que mayor número de periodistas han huido por las intimidaciones y amenazas de muerte recibidas por políticos y/o criminales. La cifra ha aumentado en un 140% en comparación al sexenio anterior (cifras oficiales, ‘mecanismo de protección para personas defensoras de derechos humanos y periodistas’ de la SEGOB).

Ser periodista en tiempos de la 4T significa ser ninguneado, vapuleado, amenazado, calumniado, señalado, ofendido, denigrado, llegando —en algunas ocasiones— a ser asesinado.

La libertad de expresión está bajo asedio; es un crimen no decirlo, no aceptarlo o, peor, regodearse (ante el incremento de la violencia sufrida por el gremio, hay gente verdaderamente enferma que se alegra).

Para quienes no lo quieren ver/entender, comparto la lista de los periodistas asesinados en este sexenio. Ellos son muestra inequívoca de lo que aquí he expuesto.

Periodistas y comunicadores asesinados en el gobierno de AMLO - Etcétera (etcetera.com.mx)

2018

1.- Jesús Alejandro Márquez Jiménez 1 de diciembre. Nayarit

2.- Diego García Corona. 4 de diciembre. Estado de México

2019

3.- Rafael Murúa Manríquez. 20 de enero. Baja California Sur

4.- Gustavo Cruz Mendoza. 20 de enero. Oaxaca.

5.- Jesús Eugenio Ramos Rodríguez. 9 de febrero. Tabasco

6.- Reynaldo López. 16 de febrero. Sonora

7.- Samir Soberanes. 20 de febrero. Morelos

8.- Santiago Barroso Alfaro. 15 de marzo. Sonora

9.- Omar Iván Camacho Mascareño. 24 de marzo. Sinaloa

10.- Telésforo Santiago Enríquez. 2 de mayo. Oaxaca

11.- José Lucio Bartolo Faustino. 5 de mayo. Guerrero

12.- Modesto Verales Sebastián. 5 de mayo. Guerrero

13.- Francisco Romero Díaz. 16 de mayo. Quintana Roo

14.- Norma Sarabia Garduza. 12 de junio. Tabasco

15.- Juan Escamilla Bautista. 23 de junio. Tamaulipas

16.- Rogelio Barragán. 30 de julio. Morelos

17.- Edgar Alberto Nava López. 2 de agosto. Guerrero

18.- Jorge Celestino Ruíz Vázquez 2 de agosto. Veracruz

19.- Arturo Jorge Ramírez. 16 de agosto. Oaxaca

20.- Nevith Condés Jaramillo. 24 de agosto. Estado de México

21.- Erick Castillo Sánchez. 14 de septiembre. Guerrero

2020

22.- Álvaro Ruiz. 5 de enero. Chiapas

23.- Fidel Ávila Gómez. 9 de enero. Michoacán.

24.- Bárbara Greco. 18 de febrero. Chihuahua.

25.- María Elena Ferral. 30 de marzo. Veracruz

26.- Víctor Fernando Álvarez. 11 de abril. Guerrero.

27.- Jorge Miguel Armenta Ramos. 16 de mayo. Sonora

28.- José Castillo Osuna. 11 Junio. Sonora

29.- Alma Angélica Aguilar. 11 de junio. Sonora.

30.- Pablo Morrugares Parraguirre. 2 de agosto. Guerrero

31.- Luis Eduardo Ochoa. 5 de agosto. Michoacán

32.- Juan Nelcio Espinoza Menera. 21 de agosto. Coahuila.

33.- Julio Valdivia. 9 de septiembre. Veracruz

34.- Arturo Alba Medina. 29 de octubre. Chihuahua

35.- Jesús Alonso Piñuelas. 2 de noviembre. Sonora

36.- Israel Vázquez Rangel. 9 de noviembre. Guanajuato

37.- Jaime Daniel Castaño Zacarías. 9 de diciembre. Zacatecas

2021

38.- Benjamín Morales Hernández. 3 de mayo. Sonora

39.- Gustavo Sánchez Cabrera. 17 de junio. Oaxaca

40.- Enrique García García. 17 de junio. Estado de México.

41.- Saúl Tijerina Rentería. 22 de junio. Coahuila

42.- Abraham Mendoza. 19 de julio. Michoacán

43.- Ricardo López Domínguez. 22 de julio. Sonora

44.- Jacinto Romero Flores. 19 de agosto. Veracruz

45.- Manuel González Reyes. 28 de septiembre. Morelos

46.- Daniel Hernández Moncada. 7 de octubre. Estado de México

47.- Fredy López Arévalo. Chiapas. 29 de octubre. Chiapas.

48.- Alfredo Cardoso Echeverría. 31 de octubre. Guerrero.

49.- Pastor Iván Carrillo Ochoa. 27 de diciembre. Sonora

2022

50.- José Luis Gamboa. 16 de enero. Veracruz

51.- Margarito Martínez. 17 de enero. Baja California.

52.- Lourdes Maldonado. 23 de enero. Baja California.

53.- Roberto Toledo. 31 de enero. Zitácuaro, Michoacán

54.- Herber López Vásquez. 10 de febrero. Salina Cruz. Oaxaca

55.- Jorge “Choche” Camero Zazueta. 24 de febrero. Empalme, Sonora

56.- Juan Carlos Muñiz. 4 de marzo. Fresnillo, Zacatecas.

57.- Armando Linares López. 15 de marzo. Zitácuaro, Michoacán

58.- Luis Enrique Ramírez Ramos. 5 de mayo. Culiacán. Sinaloa

59.- Johana García Olvera. 9 de mayo. Cosoleacaque, Veracruz

60.- Yesenia Mollinedo Falconi. 9 de mayo. Cosoleacaque, Veracruz

61.- Antonio de la Cruz. 29 de junio. Ciudad Victoria, Tamaulipas

 

Columna de Verónica Malo en SDP Noticias

Foto Internet

clh

Tags: 

municipios_interiores: 

Encuesta

¿Usted ha recibido apoyos del gobierno del estado en el último mes?