México. Tres semanas han pasado de la inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), mientras dicho escenario se mantiene vacío y sigue en construcción, el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México se mantiene con actividad constante, así como el arribo y salida de vuelos.

El Presidente de México Andrés Manuel López Obrado fue el encargado de inaugurar la terminal de Felipe Ángeles, pero actualmente no se ni una maleta allí, solo el anuncio titilante en una pantalla que anunciaba un único vuelo de la empresa Aeroméxico llegando desde Mérida y con demora.

Los problemas iniciales podrían ser embarazosos para el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien hizo de la obra un proyecto clave de su administración. También daría argumentos a la oposición que durante mucho tiempo ha criticado la obra y la ha calificado como una iniciativa vana.

López Obrador inauguró el AIFA el 21 de marzo, día del natalicio de Benito Juárez y antes de un referéndum revocatorio sobre su gestión, que ganó cómodamente a pesar de la baja participación electoral.

"Yo pienso que está al 100 el aeropuerto, completamente concluido", dejó en claro Andrés Manuel en la gran inauguración.

La realidad contrasta con el resultado vendido por López Obrador, quien calificó el proyecto como "uno de los mejores aeropuertos del mundo" antes de la inauguración.

De las 14 llegadas y salidas confirmadas en el AIFA, contrastan con los cerca de 900 vuelos diarios en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Desde su apertura, el nuevo aeropuerto ha promediado alrededor de una docena de vuelos por día, según muestran los registros de operaciones. El Ejército estima que la obra atenderá a 2.5 millones de pasajeros este año y el doble en 2023, reportaron medios mexicanos.

Aunque apenas inició operaciones, en este momento la incertidumbre rodea el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).

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