La sexualidad para muchos sigue siendo un tabú, de hecho, son muchos los mitos que aún en la actualidad siguen vigentes y que muchas personas los toma como realidades, por ende, hemos recopilado los más comunes para detallarlos un poco mejor.

Para muchas personas es un tabú visitar una tienda de juguetes para adultos, porque piensan que otras personas los van a juzgar, pero por suerte la tecnología ha hecho posible que se creen sex shop online que permite comprar de forma anónima y recibir directamente en la casa cualquier producto.

Por lo general, los mitos sobre sexualidad surgen de la vergüenza, ya que muchas personas siguen viendo esta parte de nuestras vidas como algo que se debe mantener en secreto, a tal punto de no hablar de nada que se relacione, pero ¿cuáles son los mitos más comunes?

Hay una edad adecuada para perder la virginidad

Este es uno de los mitos más escuchados, sobre todo entre los jóvenes, lo que hace que muchos sientan presión al llegar a cierta edad para mantener relaciones sexuales, solo por querer encajar entre los demás.

También hay que destacar, que aún hay mucha desinformación sobre el himen también, entonces este mito sigue siendo uno de los más comunes.

Los hombres sienten más deseo sexual que las mujeres

Aunque es cierto que la testosterona puede hacer que el deseo sexual aumente, hay que recordar que todos los seres humanos producimos esta hormona y estrógenos en proporciones variables. Considerando también que la biología es solo uno de los tantos factores que interfieren en la sexualidad.

Este mito tiene mucho que ver con los roles sociales que se esperan en cuanto a cada género, por ello la promiscuidad es mal vista en las mujeres, mientras que socialmente se espera que los hombres siempre estén dispuestos a tener relaciones sexuales. Incluso se les justifica al momento de descubrir una infidelidad, asumiendo esta misma creencia.

Los afrodisíacos aumentan el deseo sexual

Hasta el momento no se ha demostrado que exista una sustancia con la capacidad de aumentar directamente el deseo sexual, bien es cierto que hay sustancias que desinhiben a las personas, como en el caso del alcohol, pero estas tienden a perjudicar la respuesta sexual luego de un tiempo.

Hay otros productos que pueden favorecer la circulación y mejorar la respuesta sexual, pero no necesariamente se encargan de aumentar el deseo.

Es por ello que consumir alimentos supuestamente afrodisíacos, realmente incrementa el deseo, pero por efecto placebo, porque la persona cree en este mito y por ende es lo que obtendrá al comerlas, pero todo está en la mente en realidad.

Es muy parecido al morbo, ya que hay productos como los juguetes para adultos, por ejemplo el uso de un vibrador control remoto puede aumentar el deseo enormemente, ya que se trata de algo nuevo incorporado al acto sexual y permite explorar cosas nuevas.

Los que tienen pareja no deberían masturbarse

Muchos se sienten traicionados si sorprenden a su pareja masturbándose, teniendo la creencia de que si lo hacen es porque no se encuentran satisfechos o está pensando en otra persona.

Lo cierto es que la autoestimulación es algo completamente normal y sano, en todas las etapas de la vida. Además, autoexplorarse permite conocer mejor el cuerpo y disfrutar más la sexualidad, estando o no en pareja.

Este tipo de mitos puede causar conflictos de autoestima, problemas de pareja e incluso sentimiento de culpa, lo mejor en este caso es recurrir a algún sexólogo, para recibir orientaciones y vivir una sexualidad más libre y satisfactoria.

El tamaño del pene es importante

Este es uno de los mitos más escuchados y que se ha vuelto un complejo para muchos hombres, pero lo cierto es que es totalmente falso, ya que la sensibilidad de la vagina y el ano no se encuentra en puntos muy profundos.

Además, existen muchas maneras de dar placer, independientemente del coito, lo cierto es que el tamaño del pene es tomado en cuenta por la excitación que esto les produce en cuanto a la apariencia del mismo, pero las sensaciones pueden cambiar solo si es muy pequeño (que mida menos de 8 cm durante la erección) o demasiado grande (puede causar dolor).

Mitos sobre el himen

Estos son unos de los más comunes, ya que hay mucha polémica, incluso algunas personas no saben cual es el nombre exacto de esta membrana, lo que se ha vuelto toda una alarma en las redes sociales.

Hay que destacar que el himen es una membrana y una pequeña parte de piel, que se encuentra dentro del orificio vaginal, considerando que esta no cubre todo el orificio, ya que debe permitir el paso de la sangre menstrual, incluso antes de tener relaciones sexuales.

Muchos creen que el himen es una membrana muy dura, que solo la penetración puede romper, pero lo cierto es que hay varios tipos de himen, que varían desde un orificio pequeño, hasta uno un poco más grande o varios, naturales de cada mujer.

Cabe destacar, que muy pocas mujeres nacen con un “himen imperforado”, que es una membrana sin orificios, en ese caso podría ser necesario una pequeña cirugía para garantizar que la menstruación pueda fluir sin problemas, sin embargo, la mayoría de las mujeres tienen algún orificio para que este proceso ocurra óptimamente.

Lo mejor es siempre informarse, y tener en cuenta que todos los cuerpos son diferentes, esto es lo mejor de las diferencias individuales de cada persona.

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