Tehuacán, Pue.-El Obispo diocesano de Tehuacán, Gonzalo Alonso Calzada Guerrero manifestó que aun cuando han disminuido los contagios y decesos por Covid-19, la ciudadanía no debe bajar la guardia y debe seguir aplicando los protocolos sanitarios.

Expresó que pese a los malos tiempos que generó la contingencia sanitaria, lejos de que la feligresía perdiera la fe, la ha conservado y ha incrementado el sentido que tiene la vida y el acercamiento a Dios.

“La pandemia permitió a muchas personas replantear su situación personal y volver a Dios”, subrayó, al tiempo de mencionar que es importante que se siga orando para lograr que las cosas mejoren y se reactive el trabajo, así como las condiciones económicas para el bienestar de las familias.

Por otra parte, indicó que afortunadamente en la diócesis no se han registrado contagios por este virus de sacerdotes en los últimos meses, mientras que en fallecimientos solo se tiene uno en el mes de marzo del párroco, Álvaro Ortiz, por lo que se mantienen las medidas sanitarias en las iglesias, sobre todo ahora que ya se tiene una reapertura total.

Reconoció que la pandemia si perjudicó a la iglesia, dado a que se dejó de percibir el apoyo por parte de la feligresía, además de que, si se tuvo enfermos por esta enfermedad, sin embargo, afortunadamente el aforo para los templos, ya está volviendo hacer el mismo que se tenía.

Comentó que, en estas fechas de celebración de Todos Santos, es muy importante que la gente siga recordando a sus difuntos, pero debe de hacerlo con responsabilidad y respetando las disposiciones que ha marcado la autoridad, para que el semáforo epidemiológico se mantenga en verde.

Fotografía Yomara Pacheco

clh