Teziutlán, Puebla.- Derivado de la situación de la pandemia, los ingresos en algunos negocios de Teziutlán bajaron considerablemente, lo que obligó a algunos comerciantes a solicitar préstamos a grupos de agiotistas de origen colombiano, quienes ahora con amenazas reclaman su dinero y ganancia en intereses.

Al respecto, y bajo la gracia del anonimato, una comerciante de este municipio señaló que se encuentra temerosa de que sus acreedores, los cuales operan de forma ilegal, cumplan sus advertencias que incluyen amenazas de muerte.

Una de las afectadas relató que por la crisis por la que atraviesa, se vio en la necesidad de aceptar un préstamo que le fue otorgado por una persona que habita en la comunidad de la Sección 23, mismo a quien paga 500 pesos semanales, pero que ante un problema inesperado hubo un retraso en dicho pago, recibiendo a cambio una serie de ofensas y amenazas en contra de ella y sus familiares.

Por dicha situación y ante el temor de una posible agresión en su contra o sus seres queridos, esta mujer comerciante, se ha visto en la necesidad de no poder salir de su hogar, impidiendo el desarrollo de trabajo cotidiano, asentando “yo no estoy diciendo que no voy a pagar, yo estoy pagando cada ocho días, pero no se tienen que poner así”.

Cabe destacar que estas asociaciones operan de forma irregular ya que el artículo 121 de la Ley de Instituciones del Sistema Financiero determina que solo las personas que formen parte del sistema financiero nacional y que tienen el certificado de la Superintendencia de Bancos pueden captar y prestar dinero. La usura como infracción de la ley es de orden civil y penal.

cdch