El presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que si bien es legal que Emilio Lozoya pueda salir a comer a un restaurante, es inmoral e imprudente que se haya dejado ver en un sitio de lujo de la Ciudad de México el pasado fin de semana.

“Es inmoral el que se den estas cosas, es una imprudencia para decir lo menos, un acto de provocación, pues este señor fue director de Pemex y está como testigo protegido, le llaman de otra manera, pero eso es”, indicó en su conferencia de prensa.

Destacó que es un personaje que recibe un trato especial porque decidió dar a conocer toda la corrupción que se produjo en el sexenio anterior, incluso desde el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa.

Lozoya dio a conocer que a cambio de contratos, la empresa Odebrecht entregó dinero para campañas políticas y también que legisladores federales recibieron sobornos para aprobar la reforma energética.

“¿Qué legisladores?, pues los del bloque conservador. Por eso produce indignación el que esté comiendo en un restaurante de lujo, aunque legalmente lo puede hacer, se trata de un testigo de actos de corrupción que dañaron a México”.

Sostuvo que la reforma energética que ahora se quiere hacer a un lado, se aprobó con sobornos y moches que se repartieron a los legisladores.

Consideró necesario que la Fiscalía General de la República informe cómo va el proceso de Lozoya y se analice la importancia de la transparencia, ya que por el “debido proceso” no se puede informar y todo se maneja en secreto y sigilo.

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gse