La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, dijo este jueves que los esfuerzos para abordar las causas fundamentales de la migración desde tres países centroamericanos no producirán resultados inmediatos.

Harris dijo que Estados Unidos por sí solo no puede abordar los motivos profundamente arraigados para que la gente abandone Guatemala, Honduras y El Salvador, incluida la corrupción, la violencia y la pobreza. Los gobiernos de México, Japón y Corea del Sur, junto con Naciones Unidas, se han comprometido a sumarse al impulso, agregó sin dar más detalles.

La administración Biden dijo que suspendió la cooperación con la Fiscalía General de Guatemala después del despido del principal fiscal anticorrupción de la agencia, diciendo que “perdió la confianza” en la voluntad del país para combatir la corrupción.

La Casa Blanca también publicó una “Estrategia de gestión colaborativa de la migración”, que el presidente Joe Biden ordenó en febrero para describir cómo trabajará Estados Unidos con otros países para abordar los flujos migratorios.

Al igual que la estrategia sobre las causas fundamentales, el documento de una página es una declaración amplia de principios, muchos de los cuales han sido adoptados por Biden y sus principales colaboradores anteriormente. Incluyen la ampliación de las protecciones y las oportunidades laborales en los países desde donde la gente se está yendo, la creación de más vías legales para ir a Estados Unidos y el fomento de la “gestión segura y humana de las fronteras”.

El  Departamento de Seguridad Nacional dijo que reanudó las deportaciones aceleradas, conocidas como expulsiones aceleradas, para  familias que no expresan temor de ser devueltas a casa. Si bien nunca anunció una suspensión, muchas familias que ingresan al país irregularmente han sido liberadas en Estados Unidos con órdenes de comparecer ante un tribunal de migración o informar a las autoridades de migración.

fotografía: france 24

pot