HUAUCHINANGO, PUE. –  Por los posibles delitos de, “lesiones dolosas, amenazas y abuso de autoridad”, fueron denunciados, un elemento de la Policía Municipal de Huauchinango y dos de sus familiares (padre y hermano del oficial), quienes además habrían utilizado a la corporación policiaca para agredir físicamente a dos vecinos de la colonia Adolfo López Mateos. 

La agresión en la que participó el oficial de nombre, Armando N., ocurrió el pasado martes 20 de julio, alrededor de las 16:00 horas en la colonia Adolfo López Mateos, hasta donde llegó para agredir físicamente a los hermanos Antonio Javier N y Eder David, además habría detonado su arma en dos ocasiones y después con la mima arma de cargo golpeó a civiles. 

¿Cómo empezó todo? 

De acuerdo con la carpeta de investigación que se inició por parte de la Fiscalía General de Justicia, Antonio Javier N, tuvo un incidente automovilístico con Arturo N, hermano del policía municipal, en el lugar del percance, tras hacerse de palabras ambos conductores, “no pasó a mayores”. 

Las dos personas se encontraron días después en el interior de la tienda de conveniencia Aurrera y en el lugar se volvieron a hacer de palabras e incluso habría habido amenazas de parte del hermano del policía.  

Fue el 20 de julio cuando se consumaron los hechos. De primera instancia, habría sido Arturo N quien llegó hasta el domicilio de Antonio Javier N., junto con su padre Armando N., para agredirlo físicamente. 

Según los testimonios, el hermano de Antonio Javier N, que estaba en el mismo domicilio, Eder David N, salió a defender a su hermano al verlo agredido por dos personas. 

Los testigos apuntan que en el momento en que estaba la riña, llegó el citado policía municipal, “detonó su arma en dos ocasiones y empezó a golpear a los vecinos de la colonia Adolfo López Mateos. 

A la gresca se incorporaron dos policías más, identificados con los nombres de: Alfredo Silva y Valente González, sólo que lo hicieron maniatando a los civiles, para que el policía, su hermano y su padre, “los siguiera golpeando”, el oficial con su arma de cargo hasta dejarlos, “casi inconscientes”. 

En la denuncia se apuntó que, al lugar de los hechos llegó el comandante de la Policía Municipal Samuel Garrido Gaspar, quien habría amparado el levantamiento de los casquillos percutidos que fueron detonados por el policía Armando N. 

Sobre los hechos, el presidente municipal, Gustavo Vargas Cabrera, indicó que se evalúa la eventual separación del cargo que los uniformados que participaron en los hechos, dijo que existe una Comisión de Honor y Justicia en el interior de la corporación y, además, admitió que existen pruebas de lo ocurrido.