La Comisión Europea, el órgano ejecutivo de la Unión Europea, propuso un recorte del 55% de las emisiones de CO2 de los automóviles para 2030 respecto a los niveles de 2021, muy por encima del objetivo actual de reducción del 37.5% de las emisiones de CO2 para esa fecha.

"Este es el tipo de ambición la esperabamos y  ha estado ausente en los últimos años", dijo Helen Clarkson, directora ejecutiva de Climate Group,  grupo que trabaja con empresas y Gobiernos para hacer frente al cambio climático.

Bruselas también ha propuesto una legislación que obligará a los países a instalar puntos de recarga públicos a lo largo de las principales carreteras con una distancia máxima de 60 kilómetros entre ellos para 2025.

Se espera que el despliegue de los vehículos eléctricos cree 3.5 millones de estaciones públicas de recarga para automóviles y furgonetas en 2030, y que esa cifra aumente hasta los 16.3 millones en 2050.

Volkswagen AG dijo que dejaría de vender automóviles con motores de combustión en Europa para 2035, pero más tarde en China y Estados Unidos, como parte de su transición hacia los vehículos eléctricos.

Stellantis, el cuarto fabricante de automóviles del mundo, dijo que invertiría más de 30,000 millones de euros (unos 35,000 millones de dólares) para 2025 en la electrificación de su gama.

BMW y Renault, han realizado grandes inversiones en híbridos enchufables para ayudar a los consumidores que desconfían de la electricidad a sentirse cómodos con esta tecnología.

Los fabricantes de automóviles han anunciado que solo aceptarán objetivos de emisiones más estrictos a cambio de una gran inversión pública en cargadores.

fotografía: xataca méxico

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