Huauchinango, Pue. – Para integrantes de algunos grupos de voladores de la Sierra Norte de Puebla, el proveedor de la Secretaría de Cultura de Puebla, no cumplió con las especificaciones de seguridad en el “palo volador” que vendió para ser instalado en el Parque Escénico de la cabecera municipal de Huauchinango. “Está más delgado que otros que están en el centro del Pueblo Mágico”. 

Ayer domingo, algunos integrantes de grupos de voladores tradicionales se reunieron en el Parque Escénico con el fin de conocer el nuevo “palo volador” para uno de los rituales más antiguos que tiene registro en Mesoamérica. 

Algunos voladores dijeron ser de Naupan, otros de Pahuatlán y otros más de la zona más baja de la Sierra Norte, y todos coincidieron en que el “palo volador”, que es un tubo metálico, está muy delgado, “incluso a la mitad de lo que miden los tubos que están en la Escuela Primaria Carlos I. Betancourt”. 

Refirieron tener conocimiento de que se le recortó altura, al menos unos cinco metros, debido a que, “de lo contrario, hubiera quedado como antena de radio y se movería al momento en que el grupo de danzantes estuviera en la punta”. El tubo mediría alrededor de 30 metros de altura y quedó de poco más de 20. 

Otros de los aspectos que no consideró la Secretaría de Cultura, es la ubicación de la siembra de este, pues se colocó a un costado del riachuelo y en el subsuelo está “muy fangoso por el agua que se filtra y eso va a hacer que su durabilidad sea menos”, según dijeron. 

El tubo que hará las veces de “palo volador” fue instalado por la tarde del pasado sábado, se hizo un ritual que se acostumbra para pedirle permiso a la madre tierra a los dioses del bien y el mal, con el fin de evitar accidentes. 

Estuvieron presentes algunos funcionarios de la dependencia estatal, pero no dieron a conocer el nombre del proveedor y tampoco el costo del producto. 

Foto: Marco Antonio Licona  

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