Tlachichuca.-  Para algunas comunidades y familias la pandemia generada por COVID-19,  tal parece que terminó sin miedo a un rebrote, pues este fin de semana se realizó la fiesta patronal en San Francisco de Asís,  población perteneciente a Tlachichuca.

Como si estuviéramos en semáforo verde, la feria se realizó con instalación de juegos, puestos de antojitos y comercio ambulante, lo que fue el centro de atracción durante el fin de semana donde feligreses acudieron a divertirse.

A pesar que la federación instaló a Puebla en semáforo amarillo, el gobernador Miguel Barbosa Huerta público un decreto indicando que por algunas semanas más la entidad seguirá con  restricciones especificadas en color naranja, lo anterior como una medida para disminuir el número de contagios generados por coronavirus.

Sin embargo, los festejos a San Francisco de Asís se celebraron durante el fin de semana y autoridades municipales, delegados de gobernación o alguna otra instancia poco hicieron para evitar que hubiera aglomeración de personas.

Cabe mencionar que en Tlachichuca la cifra de contagios se mantiene en 82 casos positivos y 21 defunciones.

Durante la segunda quincena de septiembre y los primeros días de octubre se observa mayor relajación en varias comunidades de la región, desde festejos patronales en poblaciones pequeñas, hasta bailes sonideros donde solo se pide el uso de cubre bocas y se aplica gel antibacterial, lo que es parte de una desordenada nueva realidad.

La irresponsabilidad de algunos comités de festejos patronales, párrocos y de la sociedad en general parece encaminar  y dar la razón a especialistas, quienes afirman que para mediados  de octubre e inicios de noviembre no se descarta un rebrote y peor aún el confinamiento.

Foto Fernando Castro

agb