Recientemente la Policía Federal de Estados Unidos (FBI) y el Departamento de Seguridad Nacional están a punto de presentar formalmente una acusación contra China, por intentar hackear sus informes sobre el desarrollo de una vacuna, la cual podría ser el tratamiento contra el coronavirus COVID-19.

De acuerdo con fuentes de The New York Times y fuentes del FBI, China estaría utilizando a sus hackers más experimentados para robar la información recabada por Estados Unidos.

Incuso, varios altos cargos han dicho a TNYT que Pekín está tratando de hacerse con “propiedad intelectual de gran valor sobre vacunas y tratamientos mediante métodos ilícitos”.

Cabe señalar que la acusación que planea emitir el gobierno americano se centrará en el robo cibernético por parte de “actores no tradicionales”.

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