Atlixco, Pue. Entre reclamos, acusaciones y momentos tensos el gobierno de la ciudad evitó este sábado la instalación de la mayoría de cientos de comerciantes independiente, quienes amagaron desde el miércoles con defender a “golpes” su derecho a trabajar en medio de la contingencia por el coronavirus.

Y para asegurar el bloqueo, medio centenar de uniformados, entre elementos de la policía local y de la Guardia Nacional, fueron trasladados hasta áreas claves de la colonia Álvaro Obregón con el objetivo de resguardar la zona.

Unos 30 vendedores comenzaron a llegar a sus lugares y extendieron sus puestos sobre la vía pública. Algunos lograron hacerlo y otros mientras terminaban quedaron notificados por las autoridades de que no podían permanecer ahí debido a las medidas de sanidad impuestas por el gobierno del estado y federal.

Minutos después aparecieron algunos de los líderes de los tianguistas y acusaron directamente al ayuntamiento de “intentar matarlos de hambre” al impedirles realizar su comercio.

“Llevo aquí en el tianguis más de 40 años y jamás había visto la llegada de la policía y de los militares. Es una vergüenza”.

En respuesta, René Tetlamatzi, responsable de la oficina de Comercio y Vía Pública, insistió en que no cederán ante la solicitud de los “inconformes” de vender dos días a la semana y no uno como quedó plasmado en la minuta de acuerdo.

El operativo, explicó, se mantendrá prácticamente todo este sábado de tianguis. A la par, y como si fuera una operación hormiga, en algunas calles no vigiladas varios de los comerciantes se pusieron de manera sigilosa.

El tianguis de Atlixco genera, especialmente los sábados, el movimiento de aproximadamente 10 mil personas de cinco municipios de esta región.

Fotografía Lena Velázquez

clh