Un menor de 11 años murió apuñalado cuando intentaba defender a su hermana de 13 años y evitar que fuera violada por un sujeto, quien finalmente fue detenido.

El niño recibió 8 puñaladas que le provocaron la muerte, según informó el director nacional de la de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de la Policía Boliviana, Iván Rojas

"Él sale en defensa de su hermana y recibe heridas que posteriormente causan el deceso", declaró a los medios tras conocerse la tragedia en la ciudad de Riberalta, en la Amazonía boliviana.

La pequeña que estaba siendo agredida también resultó herida de cinco puñaladas intentando defenderse y fue hospitalizada con lesiones de gravedad.

La policía logró detener a un sujeto de 28 años, quien sería familiar de los niños y es el principal sospechoso por el asesinato del pequeño y las heridas de la hermana.

El presunto responsable tendrá que enfrentar cargos por intento de violación e infanticidio, por lo que podría alcanzar hasta 30 años de prisión.

Este año, Bolivia ha registrado al menos 43 infanticidios, en varios casos han sido los propios padres los responsables.

Tan solo en septiembre pasado, un hombre apuñaló a sus cuatro hijos luego de intentar envenenarlos. Luego los acomodó en las camas de su casa y los cubrió como si durmieran.

El responsable grabó un video relatando el múltiple homicidio, ingirió tachuelas con detergente y se lanzó de un puente, pero no murió y fue detenido.

Foto archivoe

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