Atlixco, Pue.- Al menos dos pilares más de la entrada a la iglesia de San Agustín están dañados estructuralmente y ponen en riesgo la asistencia de feligreses, como ocurrió el pasado domingo cuando dos fragmentos del templo se desprendieron y lastimaron a un niño de 8 años y su padre.

Sobre el tema, el párroco de ese templo, Horacio Gómez Guadarrama, aceptó que esa parte de la parroquia mencionada, la segunda más grande de Atlixco, no fue intervenida estructuralmente tras el sismo del pasado 19 de Septiembre del 2017.

Durante un recorrido por los alrededores de San Agustín quedó comprobado que al menos un par de figuras más, colocadas en la parte alta de los tres accesos, presentan daños.

De acuerdo con expertos esas piezas, hechas de cemento y con una varilla en medio, poseen un peso de aproximadamente cuatro kilos cada una.

El sacerdote acotó que pedirá a las instancias correspondientes una revisión para saber el grado de vulnerabilidad que representa para los transeúntes que son muchos todos los días.

Cabe recordar que una manta colocada por la fiesta de Santa Cecilia en una de esas cornisas, y desenganchada incorrectamente por empleados de un negocio de alquiler de mesas y sillas, desencadenó el estado crítico de salud de un niño de 11 años quien sigue debatiéndose entre la vida y la muerte quien recibió con la cabeza varías piedras.

Fotos Lena Velázquez

aj