Atlixco, Pue. A los 18 años Claudia recibió un balazo en una de sus piernas en su natal Cuernavaca. El incidente le cambió el resto la vida. No ofreció detalles y privó el silencio cuando se le preguntó sobre el incidente.

Pero, si aceptó platicar su experiencia de ‘enchulando la silla’ por todo el país. Sí, desde la suya, arregla a bajo costo estos vehículos y de paso, la vida a decenas de personas. La mayoría, menores de edad y adultos mayores.

“La vida puede quitarte el futuro con un incidente como el mío. O puede marcarte con lago que debes entender o asumir”, expresó mientras cambia la tapicería de la primera de este martes.

De manera coordinada, el Club Rotario Villa de Carreón, el DIF de Atlixco y un grupo de Organizaciones no Gubernamentales realizaron por tercer año consecutivo la jornada conocida como ‘enchulando la silla’.

“Se trata de ayudar a las personas más vulnerables mediante un primer diagnóstico y posterior arreglo de sus sillas de ruedas. Es un esfuerzo que más allá del tema económico, el cual resulta bajo, coopera con la visión de hacer feliz a esas familias, que de alguna otra manera no tendrían para resolver el problema”, dijo René Berra, presidente de los Rotarios.

Entre 2016 y 2017 pusieron a tono más de 170 sillas de ruedas. Y para estos tres días de trabajo en el parque del Ahuehuete, en el centro de Atlixco, esperan “enchular” otras 50.

Los responsables de concretar esa tarea son un grupo de Cuernavaca integrado en su mayoría por personas con discapacidad física.

Fotografía Lena Velázquez

clh