San Martín Texmelucan, Pue.- En el corazón de la región de San Martín Texmelucan, hoy conocida por la violencia “huachicolera”, los seguidores de la Santa Muerte levantaron hace 10 años lo que consideran el santuario más importante del país dedicado a “la niña blanca”.

Aquí, los policías, políticos y familias enteras se volvieron devotos de la Santa Muerte y vienen a verla, afirma Mario Castro Hernández, guardián del santuario construido en la junta auxiliar de San Jerónimo Tianguismanalco.

Este 1 de noviembre de 2018 el sitio cumple una década de haber sido fundado, lo que se suma a la celebración que cada 2 de noviembre es organizada para la Santísima Muerte.

Aunque ya es común ver a gente de distintas partes del país llevándole ofrendas, el guardián dijo que para su día se espera la llegada de al menos tres mil fieles.

A la Muerte le celebran una misa y le piden amor, suerte, dinero y protección, explica.  

Aunque al principio el santuario fue visto con temor y críticas por los pobladores, ahora existe un ambiente de respeto con ellos y con el resto de las religiones existentes en la localidad, refiere sin dudarlo.

La casa de la Santa Muerte

Llegar a la casa de la Santa Muerte es relativamente fácil, está a un costado de la carretera federal México-Puebla en San Jerónimo Tianguismanalco, a casi una hora de la ciudad de Puebla.

Al entrar destaca una figura de aproximadamente 1.5 metros de altura, con vestido y velo blancos, rodeada de flores, frutas y otros regalos.

Junto a ella hay más representaciones de “la niña blanca”, pero también un crucifijo, un cuadro del Sagrado Corazón de Jesús y una imagen de la Virgen de Guadalupe.

Para el guardián no hay contradicción entre venerar a la Muerte y pertenecer a cualquier religión. Detalla que aunque para muchos su presencia está relacionada con hechizos y brujería, quienes la siguen lo hacen por gratitud a una entidad con la que se sienten conectados.

La vida en la región de Texmelucan

San Jerónimo Tianguismanalco es una comunidad perteneciente a San Martín Texmelucan, una demarcación que ha sufrido por la violencia desencadenada por los ladrones de combustible en los últimos 24 meses.

Tiroteos, homicidios, “levantones” y la aparición de cuerpos desmembrados, pintaron poco a poco de rojo sus calles.

A pesar de que su principal altar está instalado en Tianguismanalco, este 1 y 2 de noviembre los festejos para la Santísima se llevan a cabo con el mismo fervor en San Lucas Atoyatenco, San Baltazar Temaxcalac, la colonia La Purísima, Santa María Moyotzingo y Huejotzingo.

Todas las poblaciones tienen algo en común: se ubican en dos de los territorios (San Martín Texmelucan y Huejotzingo) con mayores índices delictivos en el estado, de acuerdo con un reporte publicado en octubre de este año por la plataforma Semáforo Delictivo. 

Fotos e ilustración: agenciaenfoque y municipiospuebla.

GJ