Por la implementación de la política de “tolerancia cero” puesta en marcha en Estados Unidos donde se separa a los niños migrantes de sus padres, el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, expresó el rechazo total de la medida migratoria.

Señaló que no se puede ser indiferente ante un hecho que representa una violación de los derechos humanos, de igual forma informó que han entregado una nota al gobierno encabezado por Donald Trump, donde señala el rechazo y condena a esta política, así como la observación a cumplir las recomendaciones que México le ha formulado sobre el tema.

El Canciller @LVidegaray dijo que el @gobmx no permanecerá indiferente ante una situación como la separación de familias en la frontera y señaló que en la política exterior de México existe una responsabilidad moral y constitucional de protección y respeto a los Derechos Humanos. pic.twitter.com/HeMlzQ1wSz

— SRE México (@SRE_mx) 19 de junio de 2018

Finalmente aseguró que el Gobierno mexicano acudirá a todas las instancias que considere que pueden ser útiles y no descarta ninguna opción.

Tolerancia Cero

En abril, el fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, anunció la aplicación de una política de tolerancia cero ante la inmigración ilegal en la frontera entre Estados Unidos y México, esta incluye acelerar el proceso para determinar si las personas son elegibles para quedarse en el país, expulsar rápidamente a quienes se les niegue la permanencia y procesar penalmente a los inmigrantes que entren al país por primera vez, quienes antes eran procesados por la vía civil.

Ahora bien, debido a que los hijos de los inmigrantes procesados no son imputados por ningún delito, no se les permite estar en la cárcel con sus padres, por lo que son separados.

Como resultado, casi dos mil menores fueron apartados de sus familiares entre el pasado 19 de abril y el 31 mayo, según datos difundidos por las autoridades estadounidenses, quienes fueron puestos bajo custodia del Departamento de Salud y Servicios Sociales de Estados Unidos (HHS, por sus siglas en Inglés) para después enviarlos a casa de un familiar, a hogares de acogida o a refugios.

Grupos defensores de derechos humanos, activistas y representantes del Partido Demócrata han criticado duramente las separaciones, al advertir del trauma que puede infligir en los niños.

GJ