Zacatlán, Pue.- Por considerar que la extracción de feldespato que pretende hacer la empresa italiana Ecomineralli en Zacatlán producirá impactos ecológicos negativos acumulados en una región en la que  existen al menos una decena de minas similares, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) negó la licencia ambiental al proyecto Ecomineralli I.

Lo anterior de acuerdo con la resolución emitida en el expediente 21PU2016MD040 publicada en la Gaceta Ecológica número 67, que estudió la Manifestación de Impacto Ambiental que pretende el cambio de uso de suelo en un área de 799 mil metros cuadrados de terreno -79.118 hectáreas- ubicadas en territorio de la junta auxiliar de Metepec, para hacer un tajo a cielo abierto 

No obstante, según el mismo órgano oficial, la minera sometió a su consideración un nuevo estudio para obtener los permisos para el mismo proyecto –aunque en un área menor- y pretende que se le autorice deforestar una superficie de casi 80 mil metros cuadrados de donde extraerá el mismo mineral con una técnica similar.

Al rechazar la primera Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) propuesta por Ecomineralli, la Semarnat consideró que desde el año 2001 el área involucrada ha sido afectada por cambios al uso de suelo en dos ecosistemas: el bosque mesófilo de montaña –del que queda menos del 1 por ciento en el país-, y en el bosque templado y frío, para dedicarlos a la extracción de este mineral.

Indicó que el estudio propuesto por la minera italiana omitió esta situación y no previó los impactos “acumulativos, sinérgicos y/o residuales” que se causarán en esta zona donde entre el año 2001 y el 2016, se ha autorizado el desmonte de pinos del bosque templado y frío en una superficie de 2 millones 868 mil 400 metros cuadrados -286.40 hectáreas-.

Tampoco se incluyó la existencia, desde el año 2005, de los proyectos de extracción denominados La Rielera y La Valentina, propiedad de la empresa Proker, S. de R.L., que implicaron la deforestación de otros 50 mil metros cuadrados de bosque de pino-encino, especies propias del bosque mesófilo de montaña. Ni la extracción de feldespato que se hace en otros predios aledaños como Heraclio y La Fábrica, o la mina Nueva América, propiedad de la misma Ecomineralli, entre otros.

Al negar los permisos ambientales, la Semarnat argumentó que “dado que el proyecto sometido a evaluación, se sumará a los impactos ambientales que actualmente se están generado en la región, se hace necesario un análisis global sobre la modificación del paisaje, del ecosistema y a la fragmentación causados por este tipo de proyectos que es inviable analizar a través de una MIA particular, pues su estudio implica un análisis con perspectiva regional, dados los efectos que generará”.

Sin embargo, debido a que la dependencia federal dejó a salvo sus derechos, la minera de origen italiano propuso un nuevo estudio de impacto ambiental con el que pretende lograr la autorización para el cambio de uso de suelo casi 80 mil metros cuadrados de terreno en un proyecto en la misma zona y con la misma denominación que el anterior: Ecomineralli I.

Según la Gaceta Ecológica 67, este expediente –ingresado el 11 de diciembre pasado- fue registrado con el número de expediente 21PU2017M0105 y se realizarán actividades de tala y despalme para la extracción de feldespato con el uso de maquinaria, y una vez que sea extraído el material, “será transportado en camiones, por lo que no se realizará ningún tipo de beneficio dentro del área del proyecto” ubicado en la comunidad de Metepec en el municipio de Zacatlán.