Ante la falta de utilidad y los altos costos en su mantenimiento, el gobernador Antonio Gali Fayad solicitó al Congreso del Estado autorizar la enajenación del Nodo Intermodal “La Célula”, uno de los proyectos emblemáticos del sexenio de Mario Marín Torres y que tuvo un costo de 450 millones de pesos.

Versiones extraoficiales señalan que el inmueble ubicado en el municipio de Oriental se destinará para una fábrica de motores ensamblados por el Ejército Mexicano.

En la iniciativa enviada a la LIX Legislatura, el ejecutivo sólo precisa que es necesario concretar la venta de las 600 hectáreas que conforman “La Célula” localizada en el municipio de Oriental, ya que genera un alto costo al erario público.

“La superficie no es útil ni idónea para ser destinada a oficinas públicas ni para ser utilizadas para la prestación de algún servicio público, por lo cual dichos inmuebles carecen de utilidad para el Gobierno del Estado de Puebla, por lo que de mantenerlos dentro del patrimonio inmobiliario, sólo generan gastos de mantenimiento, lo que representa altos costos para el erario público; sin embargo, sí es apta para el establecimiento de diversos tipos de industria que genere beneficios al Estado y por ende a la ciudadanía”, se exponen en los motivos de la iniciativa.

Buscan en realidad donación a la Sedena

Aunque la propuesta de Gali Fayad hace referencia a una “enajenación”, Jorge Aguilar Chedraui, líder del Congreso, comentó que se reuniría con Michel Chaín, secretario de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico (Secotrade) y con personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para conocer el fin de realizar una “donación”.

El panista consideró que la medida es viable, debido a que el proyecto que se generó en el marinismo “nació muerto” y en la administración de Rafael Moreno Valle tampoco se concretó darle un uso.

El proyecto del marinismo buscó ser un punto de referencia en el tránsito comercial que va de Ciudad de México a Veracruz, ya que su ubicación permitiría captar la actividad de los corredores Puebla-Progreso, Puebla-Ciudad Hidalgo, Acapulco-Veracruz, Acapulco-Tuxpan y el del Altiplano-Arco Norte.

El gobierno de Marín Torres pagó poco menos de 5 mil pesos a los mil 129 ejidatarios propietarios de las 600 hectáreas de uso común, en las cuales las empresas Urbinco, JOCC y Constructores, Grupo Constructor y Mercaderes Iberoamericano construyeron “La Célula”.