Un promedio de 4 mil 500 menores indígenas de las zonas rurales en el estado de Puebla, tienen garantizados apoyos para impulsar su educación, como parte del Programa “Beca a un Niño Indígena” el cual cuenta con apoyos de instituciones y personas cuyos donativos o aportaciones permiten ayudar a aquellos que enfrentan un problema de condiciones de vulnerabilidad.

La presidenta del DIF Estatal, Dinorah López de Gali, señaló que estos programas de apoyo permiten garantizar que este sector de la población se desarrolle en condiciones de igualdad y con mayores oportunidades, además de que combate problemáticas como la deserción y el rezago escolar.

“Ustedes son partícipes del cambio que estamos construyendo en Puebla, en donde la educación es el principal pilar del desarrollo”, dijo López de Gali en un mensaje que dirigió a los benefactores de este programa.

La titular del SEDIF resaltó que este organismo seguirá sumando esfuerzos y buscando alianzas con personas comprometidas interesadas en apoyar el porvenir de la niñez poblana. En representación de los donadores, Luz María Spinola López, directora general de la empresa Gallelis, aseguró que para su compañía es gratificante apoyar estas causas que buscan mejorar la vida de la población infantil.

Además, reconoció el trabajo hecho por Dinorah López de Gali para asegurarse de que la población en situación vulnerable continúe recibiendo diversos beneficios.

Los donativos para “Beca un Niño Indígena” fueron entregados por Wilma Julián Ruiz, la empresa Gallelis, Grupo San Marcos, Granjas Carroll de México, el Sistema Municipal DIF de Teziutlán, Universidad México-Americana del Golfo, Casas El Pilar, Fundación José Luis Castillo Díaz, Provident de México, Gon Pard Zapaterías, Automotive Veritas de México, Grupo Sloram y MC Autollantas.

Lo anterior fue informado a través de un comunicado de prensa.