Venustiano Carranza, Pue.- Dos hombres originarios de la junta auxiliar de Lázaro Cárdenas, en el municipio de Venustiano Carranza, fueron degollados durante un asalto perpetrado sobre la carretera San Diego-Mecapalapa, informaron fuentes policiales.

Las víctimas fueron identificadas como Venancio Torres Juárez, con domicilio en la calle Pinos de la colonia El Mirador, de oficio chofer de taxi; y Enrique Ortiz, de 30 años de edad, quien vivía en la avenida Palma Sola, quien conducía un camión que transportaba naranjas.

De acuerdo a la información, el suceso ocurrió cerca de las 22:30 horas del jueves cuando ambos regresaban de trabajar.

El cuerpo de Venancio se encontraba afuera de su taxi, el número 31 del sitio La Uno, justo en el kilómetro 4 + 100, por lo que se cree que intentó escapar de sus homicidas, a quienes subió a su unidad luego que regresaba de una población cercana.

Versiones indican que lo siguieron hasta darle alcance, por lo que al no poder defenderse intentó huir, sin embargo, fue interceptado y atacado con un arma blanca con la que le cortaron el cuello. Su cuerpo quedó boca abajo, fuera de su vehículo y de sus bolsillos fueron extraídos dinero y otros objetos de valor.

Cinco kilómetros adelante fue hallado sin vida Enrique, quien murió desangrado al interior de su camión, un torton marca International cabina blanca, con placas de circulación XW-96439 del estado de Veracruz, cargado con naranjas, que habría comprado en una comunidad de Pantepec.

Aunque no se ha dado información oficial en torno a los hechos, se dijo que presumiblemente el conductor del camión naranjero fue testigo del asalto y el homicidio, por lo que fue alcanzado kilómetros adelante por los delincuentes que lo despojaron de sus pertenencias y lo degollaron.

Minutos después de conocerse la noticia, policías municipales de Pantepec y Francisco Z. Mena y elementos de la Estatal instrumentaron operativos de búsqueda, sin embargo, no hubo personas detenidas.

Al sitio llegaron agentes ministeriales quienes tomaron conocimiento de los hechos. Fue durante el amanecer cuando terminó el levantamiento de los cadáveres para enviarlos al anfiteatro de  Xicotepec en donde les practicaron la necropsia de ley.