Izúcar de Matamoros, Pue.- Las tradicionales alfombras de colores, hechas con aserrín, vistieron los viacrucis que el Viernes Santo se realizaron en diversas poblaciones de la región de Izúcar de Matamoros.

Su colocación es para recordar la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén.

Se sabe que la costumbre fue traída de Europa por los conquistadores. Y es que la elaboración de alfombras era muy popular en España en el siglo XIV.

Silvano Valente, habitantes de Villa de Atencingo, comentó que también pueden ser instaladas con flores.

Las alfombras de aserrín tienen una preparación laboriosa pues primero se trabaja en hacer que su textura sea pareja y luego se tiñe. La belleza del adorno tiene que ver no solamente con su diseño, también con la brillantez de sus colores.

Hacer una alfombra  sencilla puede tomar un par de horas, agregó.

Cada una de ellas es hecha por familias o grupos de amigos frente a sus casas como una manera de agradecimiento con Dios.

Los viacrucis

Entre los eventos que destacaron en Semana Santa en la región de Izúcar de Matamoros, se encuentra la representación en vivo que se efectúa en Tilapa, el viacrucis de Villa de Atencingo y el de la colonia El Calvario.

Se calcula que entre Jueves y Viernes Santo más de 50 mil personas participaron en las celebraciones religiosas.

Eliseo Morales, presidente municipal de Tilapa, expresó que el viacrucis logra reunir a cerca de 10 mil personas.

En la escenificación participan 120 personas que recorren durante la mañana 5 kilómetros para representar los últimos momentos de Cristo.