Zaragoza, Pue.- Luego de recibir una llamada de auxilio sobre el supuesto robo de ganado en la comunidad de Las Trancas y tras atender otro telefonema por detonaciones de arma de fuego, tres patrullas salieron de la comandancia de Zaragoza lo que permitió que un comando armado sometiera a los únicos dos elementos que se quedaron ahí la madrugada del miércoles.

Emiliano Vázquez Bonilla, comisario de Seguridad Pública y Vialidad  de Zaragoza, señaló que eran aproximadamente las 3:00 horas de este miércoles se recibió una llamada sobre el supuesto robo de unos borregos por lo que  elementos salieron en dos unidades.

Minutos más tarde comenzaron a escuchar detonaciones de arma de fuego en el lado oriente de la ciudad, por lo que otra camioneta salió a verificar la situación, quedando solamente dos agentes de guardia. Hasta ese sitio llegaron cinco hombres armados y encapuchados que entraron a la comandancia y le dieron un cachazo a un policía, para luego tirar a los uniformados al piso mientras les apuntaban.

Los ladrones rompieron el armero y se llevaron 4 escopetas calibre 12 tipo mossberg, una pistola Pietro Beretta calibre 9 milímetros, dos cajas de cartuchos útiles 9 milímetros y otra caja más de 38 especial haciendo un total de 100 proyectiles, tres radios con la frecuencia de Seguridad Pública y tres chalecos antibalas.

Mientras eso ocurría en la comandancia, otros individuos abrieron un cajero del banco Santander y se llevaron las charolas con el dinero en efectivo.

Cabe señalar que cuando los policías que acudieron al llamado de auxilio llegaron al sitio Las Trancas, encontraron sobre la carretera había bollas de metal con clavos soldados lo que ocasionó que las llantas de una camioneta se poncharan por lo que no pudieron regresar a evitar el robo.

Durante este miércoles efectivos de la Policía Municipal, así como personal de la Procuraduría General de Justicia y peritos especializados llevaron a cabo las indagaciones correspondientes para poder dar con los probables responsables de estos hechos.

Sobre supuestas amenazas en su contra, Vázquez Bonilla señalo que no hay nada de eso, pues el ataque no iba dirigido sobre él.