Teziutlán, Pue.- Las altas temperaturas del verano aceleran el proceso de descomposición de los alimentos, situación que a su vez deriva en un aumento del 10 por ciento en la incidencia de enfermedades gastrointestinales en el municipio de Teziutlán, informó el director del Centro de Salud con Servicios Ampliados (CESSA) de esta demarcación, Ernesto Ceja Tapia.

Por lo anterior, exhortó a la población a evitar el consumo de cualquier comida o bebida que se comercialice en la calle, como aguas frescas, antojitos o fruta picada, ya que las condiciones de calor y polvo aumentan el riesgo que el producto pueda ocasionar alguna infección estomacal.

Al respecto, dijo que los niños y personas de la tercera edad son los más propensos a sufrir de alguna enfermedad derivada de la ingesta de alimentos que ya no son aptos para su consumo.

 “En los alimentos al momento que empezamos a prepararlos comienzan a reproducirse bacterias, parásitos si no tenemos cuidados y si no los consumimos en el momento, si los dejamos y no los refrigeramos, seguramente cuando lleguemos a la hora de consumirlos ya va a tener una gran cantidad de bacterias y va a provocar una infección gastrointestinal”, explicó Ceja Tapia.

Por último, el director del CESSA reiteró que existe un mayor riesgo el beber aguas frescas, pues no se tiene certeza si el agua con la que se preparan es potable y cumple con todas las medidas de higiene.