Francisco Z. Mena, Pue.- Al cumplirse una semana en contingencia ambiental por el derrame de “hidrocarburos” en suelos aledaños y las aguas del río Pantepec, vecinos de Los Naranjos y El Limonar en Francisco Z. Mena, manifestaron su preocupación por la lentitud en la recolección del líquido vertido en unos 18 kilómetros de la corriente y un área de 6 mil 400 metros de terreno.

En tanto las consecuencias del derrame de “hidrocarburo” ocurrido el pasado 11 de febrero, a causa de la volcadura de una pipa propiedad de la empresa Transportes Especializados de Toluca S. A. (TETSA), se siguen resintiendo entre unos 7 mil pobladores de siete comunidades que cumplieron una semana sin servicio de agua potable entubada.

Mientras, aumenta la cuantificación de los daños ecológicos causados debido a que “las acciones de la compañía responsable no han sido rápidas”, consideraron algunos vecinos de Los Naranjos y El Limonar.

El lugar donde volcó el camión cisterna cargado aparentemente de un hidrocarburo es conocido como “La curva de Los Naranjos”, donde está ubicado el rancho propiedad de Juan Manuel Merchant. Es aquí donde hasta el momento se ha calculado que hay un área contaminada de 6 mil 400 metros cuadrados.

Hasta este lugar llegó una máquina pesada que realizaría labores de remoción de la tierra contaminada, “pero no ha estado trabajado de manera intensa, solamente llegó, removió unos 20 centímetros de profundidad en un área de 80 por 80 metros y la mayor parte del tiempo ha permanecido parada”, declaró el afectado.

Entre los pobladores de las localidades de Los Naranjos y El Limonar, existe desconfianza debido a que, “comúnmente se ve juntos a los funcionarios de la Semarnat y de TETSA. Llegan juntos y se van juntos”.

Para los lugareños, no se ha detenido la propagación de la sustancia contaminante y calcularon que ya llegó unos 18 kilómetros río abajo. “Donde el material oscuro y grasoso ha matado a peces y acamayas”.

Algunos criadores y productores de carne de ganado vacuno han tenido que “achicar sus bovinos en corrales o en áreas de potrero reducidas para evitar que beban agua envenenada por el derrame, porque ya se ha sabido que algunas hembras han malparido y otros animales han muerto, como los del ex presidente del Comité de Fomento y Salud Animal del Estado de Puebla, Alfonso de Vega García”.