Ocoyucan, Pue.- Por segundo día, una veintena de personas mantiene pacíficamente la toma de la presidencia municipal de Ocoyucan para exigir la renuncia del edil Francisco Cimarrón Ocoxtle, a quien acusan de desviar 80 millones de pesos de recursos públicos.

Los regidores Socorro Montes Montes e Iván Garista Gordiano, quienes son las cabezas visibles del movimiento de resistencia, negaron que la protesta sea resultado de un conflicto con trasfondo político, aunque ambos reconocen que al igual que el alcalde llegaron impulsados por la organización priísta Antorcha Campesina. Aseguraron que su inconformidad es genuinamente ciudadana.

Pese a que la toma del inmueble oficial se dio desde la mañana del martes, 24 horas después no se había tenido acercamiento con funcionarios de Gobernación para llegar a algún acuerdo, tampoco se advertía presencia de Policía Estatal.

Los manifestantes colocaron sellos de papel a las puertas de las oficinas administrativas y la del presidente en presencia de policías municipales, para evitar que se les acuse de faltantes o daños.

Explicaron que las irregularidades cometidas por el presidente van desde precios inflados hasta obras “fantasma” y falsificación de actas de Cabildo, con lo cual ha logrado aumentar visiblemente su patrimonio y su negocio, una casa de materiales para construcción.

Las irregularidades documentadas por los quejosos revelan que un pozo profundo reportado como excavado en la junta de Sarabia, que tuvo un costo de 8 millones de pesos, no existe.

Otra anomalía está relacionada con los supuestos trabajos de remodelación de la Unidad Deportiva en la cabecera municipal, que reflejan un gasto de 700 mil pesos, pero que no son percibidos.

Un dato más, agregaron, es que el edil informó del gasto de 2.8 millones de pesos para impulsar el deporte, con la compra de trofeos, uniformes y la adquisición de 2 autobuses equipados para el traslado de atletas, pero no se conocen los vehículos, además de que el hace traslados por medio de las concesiones de transporte que son de su propiedad.

En las obras del camino de Santiago Coltzingo a Emilio Portes Gil refirió un gasto de 800 mil pesos para la rehabilitación, pero según los inconformes sólo se envió una máquina “dos medios días”.

Señalaron que incluso las actas de los comités de obra son llenadas con nombres de personas sin su consentimiento.

Se buscó al presidente municipal para conocer su punto de vista pero no fue posible encontrarlo en su domicilio.