Sierra Norte de Puebla.- Los cadáveres de al menos nueve personas –todas de sexo masculino-, han sido arrojados a la orilla de la autopista México-Tuxpan en los cinco meses que tiene de haber sido inaugurado el tramo Nuevo Necaxa-Tihuatlán por el presidente Enrique Peña Nieto. La mayor parte de estos crímenes continúan en la impunidad.

Algunos amordazados, atados de pies y manos y con tiros en la cabeza, el 80 por ciento de los cuerpos ha sido hallado en territorio de tres municipios de la sierra baja: Venustiano Carranza, Jalpan y Xicotepec.

Durante su inauguración, el pasado 17 de septiembre, la autopista fue presentada como la más esperada e importante del país, porque al maximizar la conectividad regional y al modernizar el puerto de Tuxpan, se convertiría en un corredor comercial internacional, sin embargo también es la ruta de “una zona caliente y el hecho de que estén tirando cadáveres ahí, podría ser una señal de que los grupos criminales están marcando territorio”.    

Esta consideración fue hecha por Francisco Rodríguez, abogado con especialización en temas de Seguridad Pública quien, consultado por www.municipiospuebla.mx, dijo que la súper carretera que va de la capital al Golfo de México es “el camino más ágil para conectar dos puntos con fuerte presencia del crimen organizado: Poza Rica en Veracruz y Tulancingo en Hidalgo”.

Aquí, apuntó, confluyen algunas ciudades que son vértices importantes para los grupos delincuenciales: “por el sur las veracruzanas Poza Rica, Tihuatlán y Cazones; y, al norte, la costa del Golfo y, por supuesto, Tamaulipas”.

Así que, aventuró, “estos crímenes y, sobre todo el hecho de arrojar los cuerpos en esta área, porque por lo que se ve los homicidios no han sido cometidos aquí, tengan la intención de marcar territorios”

Rodríguez además ubicó otra constante en estos casos: “no vas a encontrar información oficial al respecto”.

En efecto, salvo los reportes de los descubrimientos de los cuerpos, no hay mayores datos sobre el asunto y hasta el momento, ni la Procuraduría General de la República (PGR), ni la de Justicia del estado de Puebla (PGJ), han dado a conocer informes sobre el esclarecimiento de alguno de estos crímenes o la detención de algún presunto responsable de los mismos.

Los asesinatos

El 10 de septiembre de 2014, una semana antes de la inauguración de la autopista México- Tuxpan, la Policía Federal encontró los cadáveres de tres hombres –uno de ellos esposado-, en una barranca aledaña a la carretera, en la zona del rancho Santa María, a la altura del kilómetro 187+900 en el municipio de Venustiano Carranza.

De acuerdo con datos oficiales, la causa de la muerte de estas personas, cuyos cuerpos estaban en estado de descomposición, fue traumatismo encefálico severo provocado por lesión de arma de fuego.

Sobre el asunto se inició la carpeta de investigaciones 91/2014/Metlaltoyuca.

Un mes antes, el 11 de agosto de 2014, a la altura del kilómetro 126+130, cerca de los límites de los estados de Puebla e Hidalgo, la Policía Federal localizó los cadáveres de dos hombres, uno de entre 28 y 30 años de edad y otro de unos 70 años, que quedaron en calidad de desconocidos.

De acuerdo con versiones extraoficiales, los individuos al parecer perdieron la vida tras ser atropellados, pero otros informes apuntaron a que los cadáveres fueron “tirados en este lugar”. La Policía Federal precisó que aunque no pudo establecer la identidad de estas personas, “podría tratarse de dos indigentes que acostumbraban caminar por ese tramo”.

Ninguna de estas versiones fue confirmada oficialmente.

El 14 de enero de 2015, amordazados, amarrados de pies y manos y con balazos en sus cabezas, fueron hallados los cuerpos de dos personas a un costado de la autopista México-Tuxpan a la altura del municipio de Jalpan, muy cerca del kilómetro 191+ 460.

Los transeúntes indicaron que se acercaron a la cuneta donde estaban tirados los cuerpos en estado de putrefacción, debido a que había una gran cantidad de zopilotes.

El 19 de enero se encontró el cuerpo completamente despedazado de una persona en el kilómetro 187+300 en la zona perteneciente al municipio de Venustiano Carranza. La versión oficial apuntó a que había sido embestido por uno o varios automóviles "fantasma".

La PGJ informó que el hallazgo de los restos fue reportado por personal de Autovía Necaxa- Tihuatlán (AUNETI), concesionaria de la pista, que a su vez fueron alertados por automovilistas que circulaban por esta zona.

De acuerdo a lo informado, el occiso no portaba ninguna identificación. Sólo se encontró su ropa, zapatos y un machete, por lo que se presume que se trataba de un campesino.  

Los hechos quedaron registrados en la Carpeta de Investigación Número 015/2015/Metlaltoyuca, por el delito homicidio.

Mientras que este 2 de febrero, sin ojos y con golpes en diversas partes del cuerpo fue encontrado el cadáver de un hombre en el kilómetro 144+300 de la autopista México-Tuxpan.

Elementos de la Policía Estatal y soldados acudieron al sitio al que más tarde arribó el agente del Ministerio Público de Francisco Z. Mena. Por la noche, la víctima fue identificada por su padre, como Alejandro Hernández Espinoza, de 33 años de edad, sin embargo se ignora cómo ocurrieron los hechos en que perdió la vida.

Según versiones de la Policía Municipal de Jalpan, el cuerpo no tenía ojos y una oreja estaba incompleta, por lo que no se descarta que hubiera sido torturado antes de matarlo.