Huauchinango, Pue.- Usuarios de los servicios de la oficina de la Secretaría de Finanzas ubicada en el centro de Zacatlán se quejaron de los malos tratos del personal, especialmente de la responsable del lugar Ana Nelly Sosa, quien “tiene un trato despectivo, prepotente, sólo porque ve que la gente no es de ese municipio y la ve humilde”.

Los quejosos encabezados por el empresario del autotransporte en Huauchinango Edilberto Barrera González señalaron al personal de las oficinas del gobierno del estado como responsables de que en ese lugar esté “empeorando el trato a la gente”.

El declarante, al igual que otros inconformes, señaló que han sido testigos del “trato despectivo y prepotente de Ana Nelly Sosa, de quien vimos y después investigamos su nombre para poder hacer la acusación, porque no se vale que porque vea que los usuarios son de Huauchinango o de otros lugares de esta región, nos trate mal. Lo mismo hace cuando se percata que son gente de escasos recursos”, dijo.

Los quejosos dijeron tener información de que las oficinas de esa dependencia serán regresadas a Huauchinango, por gestiones del alcalde Gabriel Alvarado Lorenzo, por lo que recomendó que “se seleccione bien al personal que va a trabajar al regreso de esos servicios, para que no se contrate a personas por influyentísimos y que no sepan tratar a quienes pagamos nuestros impuestos”.

Por otro lado, destacó que en los trámites no exista una coordinación entre las oficinas que están en Puebla y las de Zacatlán. “Porque se cumple con los trámites en la capital y en Zacatlán dicen que la documentación está mal por algún detalle y si se llega a Puebla pasa lo mismo y somos los usuarios quienes tenemos que andar dando de vueltas y gastando. Además sufriendo el mal trato de los burócratas”.

Refirió que sabe de algunas personas que se han tardado en sus trámites entre cinco y seis días por la ineficiencia de los empleados de la Secretaría de Finanzas en Zacatlán.

Cierre y molestias

A principios de febrero pasado, cuando el ex alcalde Omar Martínez Amador se negó a pagar la renta del local que ocupaba la delegación de Finanzas en Huauchinango, esta oficina fue cerrada a la atención al público.

La medida fue dada a conocer a los usuarios a  través de hojas de papel bond colocadas en los cristales para que acudieran a pagar sus contribuciones a la ciudad de Zacatlán.

El cierre de Finanzas afectó no sólo a los huauchinanguenses sino a los habitantes de otros 30 municipios de la región, entre ellos los que se encuentran en los límites con el estado de Veracruz como Francisco Z. Mena, Pantepec y Venustiano Carranza, además de otros en los que los accesos se están en pésimas condiciones como Tlaola, Tlapacoya, Jopala.  También a los de Ixtacamaxtitlán, Honey y Pahuatlán.