Huauchinango, Pue.-  Fausto Juárez Fosado presentó una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos contra el alcalde de Venustiano Carranza Rafael Valencia Ávila a quien responsabilizó de haberle proferido amenazas de muerte. En entrevista el edil negó los hechos y dijo que no conoce a la presunta víctima, pero lo emplazó a que presente las pruebas que tiene en su contra.

Fausto Juárez acudió este 21 de Julio ante el organismo para denunciar los hechos que habrían ocurrido hace más de un mes, el pasado 7 de junio de 2014, y pidió su intervención porque consideró que se están violando sus derechos debido a que luego de que lo detuvo la policía municipal de V. Carranza el presidente lo habría amenazado, incluso “pistola en mano”.

Sobre estas acusaciones Valencia Ávila señaló que él no conoce a Juárez Fosado, que nunca lo ha visto y que durante su campaña política recibió muchas acusaciones similares, por lo exigió que el presunto agraviado presente las pruebas que tenga en su contra ante la CDH estatal, ante la que dijo estar dispuesto a comparecer para esclarecer los hechos.

De acuerdo con las declaraciones de Juárez Fosado, el 7 de junio pasado en la esquina de las calles División del Norte con Francisco Villa en la junta auxiliar de Villa Lázaro Cárdenas (La Uno), fue sometido a una “revisión de rutina” por el comandante de la Policía Municipal, Eduardo Arroyo Martínez acompañado de cinco elementos más, tres en una patrulla (camioneta) y dos oficiales motociclistas.

Luego de esto el comandante le dijo: “vamos a arreglar unos problemas con el presidente municipal” (Rafael Valencia Ávila), por lo que le quitaron su celular, zapatos y cinturón.

Según su declaración el alcalde llegó 20 minutos después y ordenó que lo pasaran a su oficina. Ahí le dijo: “me andabas buscando para matarme”, por lo que Fausto le respondió “no tengo problemas contigo”. Acto seguido, Rafael Valencia dijo -según Fausto- “de que lloren en mi casa, que lloren en la tuya y sacó una pistola, cortó cartucho y me la puso en la frente”, relató.

Las amenazas se habrían repetido durante 20 minutos, Luego, aseguró, regresó a los separos donde firmó su salida, pero no lo dejaron ir sino hasta las 22:15 horas del mismo día 7 de junio. Después el alcalde le habría ofrecido un “aventón” a su casa en su camioneta, por lo que se subió al vehículo, pero en el trayecto “continuaron las amenazas en su contra”.