Acatlán de Osorio, Pue.- Familiares de los internos del Centro de Reinserción Social de Acatlán, volvieron a manifestarse en contra del edil Guillermo Martínez Rodríguez porque no ha cumplido con las promesas que hizo hace unos días sobre mejorar la atención de los reclusos, así como designar al nuevo director del Cereso y regresar la tienda con la que los internos contaban en el interior del penal.

Paula Onofre Bautista, una de las inconformes, dijo que “el presidente municipal no sabe cumplir su palabra y la situación en el Cereso sigue de mal a peor, los internos a veces no tienen ni agua para beber, mucho menos comida y tanto policías como custodios siguen siendo déspotas y prepotentes con los familiares de los internos cuando llegan a solicitar las visitas”.

Miguel Rojas Tobón, otro inconforme, dijo que en la reunión anterior del 28 de abril el edil Guillermo Martínez se comprometió a solucionar los problemas que ellos denunciaron, a proporcionar el gas, la luz y el agua para el Cereso, así como regresar la tienda y nombrar a un director para dicha institución, sin embargo, ya se pasó el tiempo y no hay nada, en el penal sigue el mismo responsable, Felipe Morales Escamilla, quien es también director de Seguridad Pública y ha sido prepotente con los familiares de los reclusos.

Por su parte Alondra León García, esposa de uno de los internos del penal, señaló que el edil habla mucho pero nada de lo que dice cumple, lo mismo hizo en su campaña, hizo que la gente creyera en él y ahora es la decepción. “Como grupo de inconformes ya nos han citado varias veces y nos hemos reunidos con el presidente, con el regidor de gobernación y con el secretario pero hasta ahora no nos han dado ninguna respuesta, aun cuando se han hecho compromisos, nada se ha cumplido”.

Denunció que el único cambio que han notado es que el responsable del Cereso, Felipe Morales Escamilla, ha dado instrucciones de que los que han estado protestando en contra de él, no los dejen pasar a visitar y hay amenazas además de que los policías se quedan con sus pertenencias que dejan al entrar a la visita, “simplemente dicen que no las dejaron y se las roban”.