Chila de las Flores, Pue.- De acuerdo con la iglesia católica, la Cuaresma inicia con la celebración religiosa del miércoles de ceniza y el primer viernes hasta contar el sexto viernes para dar paso a la Semana Santa, mejor conocida como Semana Mayor.

Debido a estas tradiciones muchos municipios de la Mixteca poblana se encuentran de fiesta cada fin de semana, este viernes corresponde a la fiesta del cuarto viernes y toda la celebración está enfocada a la imagen de un Cristo al que llaman de la Salud, del Calvario, de la Misericordia, el Cristo de la Clemencia, etc., de tal forma que cada pueblo tiene su Cristo.

El arqueólogo José Alfredo Arellanes, de Chila de las Flores, comentó  que en este municipio existen cuatro imágenes de Cristo, uno de ellos es de madera muy antigua, considerado el más grande y más pesado; se trata de un Cristo que representa a Jesús ya fallecido, según archivos fue adquirido en Tlaxcala en 1808, es una imagen que cada tercer viernes de Cuaresma es venerado en esta población.

Así mismo el investigador de documentos religiosos, dijo que es un Cristo que en comparación con otros, está muy poco flagelado, además de que las personas que tienen un problema se encomiendan en él y atiende su petición, por eso le llaman “El Señor del Buen Despacho”.

Cientos de peregrinos de distintos puntos de Puebla y otros estados vienen cada año a saludarlo, a darle gracias por los beneficios recibidos y otros a pedirle ayuda, le encomiendan sus problemas ya sean de salud, de dinero, de trabajo o fuertes enfermedades como el cáncer, todo lo ponen ante la imagen que se cree cura y atiende todo.

Los pobladores señalan que el Cristo por ser el más pesado ya no pudo continuar y sé quedó en este municipio, por eso desde 1808 es venerado cada tercer viernes de Cuaresma.

Asimismo, se sabe que antes de la independencia, en los viernes de cuaresma, se realizaba una procesión con esta imagen en el atrio del templo y en su día salía otra procesión por las principales calles del pueblo, tradición que permanece hasta la actualidad. Este año los festejos iniciaron con un triduo de misas con mañanitas y por la tarde una solemne procesión, durante la cual los participantes se turnan para cargarlo debido a que es muy pesado.

De igual forma, para realizar la festividad, año con año se nombra una nueva mayordomía que será la encargada de organizar y coordinar las actividades religiosas. En esta ocasión, la responsabilidad recayó en integrantes de la familia Trujillo Morales, quienes como una forma de agradecer a los asistentes a esta festividad obsequiaron tamales y atole.

La población cuenta que en tiempos de la Revolución Mexicana llegó a este pueblo un general zapatista a pedirle al Cristo milagroso que ganara una batalla y fue tal el milagro que el general ganó dicho combate, pese a la superioridad numérica y de armas del enemigo. Desde entonces y hasta la fecha, el Cristo no ha perdido presencia, miles de creyentes lo visitan, pasan a saludarlo.

El fervor de los creyentes es depositado en una reliquia que forman con un racimo de manzanilla, el cual pasan sobre la imagen del Cristo. Es tan grande la fe que después esa reliquia es utilizada para curar a los enfermos o los niños que están a punto de morir.