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Alcaldes desmantelan Ayuntamientos al cierre de sus trienios
En la última semana de sus gobiernos, presidentes municipales de todas las regiones del estado enfrentan conflictos por inseguridad, servicio de limpia, ambulantaje, obras públicas, despidos injustificados y falta de recursos para cubrir nóminas, por lo que han tenido que emprender la venta de muebles y automóviles para afrontar los últimos gastos.
El Ayuntamiento de Tehuacán, el segundo municipio más importante del estado por la cantidad de su población, dinámica económica y laboral, enfrenta un cierre forzado de sus finanzas, por lo que de última hora remata bienes que a decir de su tesorero municipal, Norberto Paul Sánchez Romero, servirán para cubrir “situaciones extraordinarias”.
Las áreas que se encuentran con mayor problema son las de Salud y Seguridad Pública, donde carecen de medicamentos y gasolina para el abasto de unidades, por lo que entre los bienes en remate se encuentran vehículos, escritorios, sillas y archiveros utilizados durante la administración de Eliseo Lezama Prieto.
A decir del funcionario, el presupuesto ya estaba programado hasta el último día del trienio, por lo que al menos los sueldos y gastos menores están garantizados.
La administración de Ricardo Camacho Corripio, presidente municipal de Atlixco aunque no enfrenta conflictos financieros, su principal problema es la inseguridad, pues en el último trimestre del 2013 reportó un alza en los delitos, al presentar 402 de octubre a diciembre de 2013, cuando en el mismo periodo del año 2012 fue de 379.
El municipio además enfrenta conflictos con los productores y comerciantes de flores que fueron desalojados del centro y enviados a un predio ubicado fuera de la ciudad donde carecen de servicios básicos y el transporte es escaso. De igual forma a lo largo de los tres años de gobierno, el edil no pudo resolver los adeudos de miles de usuarios del sistema operador de agua potable.
Recientemente el edil inició el cambio de 8 mil luminarias por lámparas de leds, mediante un Proyecto de Prestación de Servicios (PPS) que tendrá que ser pagado durante los próximos 10 años, cubriendo mensualidades de un millón 400 mil pesos.
Caso similar se presenta en San Martín Texmelucan, sede del tianguis más grande de América Latina, donde el comercio informal ha inundado las calles del municipio sin que la autoridad municipal hay podido meter en cintura a los ambulantes.
La comuna que encabeza Teodoro Ixtlapale Caporal enfrenta serios problemas económicos que heredará a Rafael Nuñez Ramírez, principalmente derivados de conflictos legales que la Sindicatura nunca pudo resolver. Tal es el caso del predio San Damián que alberga los edificios de Seguridad Pública y que fue perdido en un litigio con una particular que lo reclamó como propio, así que ahora la administración tendrá que pagar más de 70 millones de pesos por concepto de indemnización. A esta deuda se suma la de 1.2 millones de pesos por concepto de despidos injustificados realizados al arribo de Ixtlapale Caporal como edil suplente, a la mitad del trienio que concluye.
Entre el parque vehicular que heredará a su sucesor, se encuentran 35 vehículos que fueron adquiridos desde la pasada administración y que actualmente ya se encuentran en calidad de chatarra, por lo que el edil no duda en ponerlos en venta.
Caso extremo es del municipio de Huauchinango, donde al cierre del trienio de Omar Martínez Amador, la comunidad se enteró que los vehículos que utilizaba el personal del ayuntamiento no eran propiedad de la Comuna, sino que a decir del edil, fueron rentados a particulares, por lo que ahora tendrán que regresar a las empresas que los alquilaron.
Esto, se suma a los problemas de inseguridad que sigue registrando la demarcación, pese a recibir 10 millones de pesos anuales del Subsidio para la Seguridad en los Municipios (Subsemun), de los cuales los policías municipales nunca recibieron sus incentivos, aunque ya firmaron la nómina.
No obstante según el edil saliente, en su último informe de labores destacó la “honestidad y la transparencia” como características de su administración, mientras que presentó obras inconclusas como el Campus de la BUAP y el Puente Vehicular Huauchinango, sin contar el mercado municipal que ha estado en reparaciones desde inicios del 2010.
Otro de los municipios que enfrenta apuros para solventar sus gastos de operación en la recta final, es Nealtican, donde el presidente municipal, Fernando Luna Grande, ha puesto en venta una camioneta recién adquirida por el ayuntamiento, la cual servirá para pagar los salarios de los trabajadores en esta última quincena.
Una situación semejante pasa la Comuna de Juan C. Bonilla, donde el alcalde Andrés Cadena Zamora optó por ya no pagar el combustible de las patrullas, motivo por el que ahora una veintena de uniformados tienen que desplazarse a pie durante sus rondines de vigilancia.
De igual forma, la semana pasada el edil electo de Jalpan, Humberto Olarte Romero, acusó que el edil saliente, Nicolás Galindo Márquez, está desmantelando el ayuntamiento, dejando problemas de inseguridad, ingobernabilidad y con obra pública inconclusa.
Otros municipios más como Tlatlauquitepec, San Andrés Cholula, San Pedro Cholula, Tehuacán, San Martín Texmelucan, Tepeaca, Teziutlán e Izúcar de Matamoros han optado por ir reduciendo paulatinamente su plantilla laboral para evitar mayores afectaciones a las arcas municipales.
Protestas y suspensión de servicios
La falta de recursos en los municipios ha provocado además de conflictos internos, suspensión de los servicios de vigilancia y de limpia, por lo que incluso los propios pobladores han tenido que organizarse para disminuir las afectaciones.
En los últimos días de enero, pobladores de San Pedro Cholula se quejaron por la suspensión del servicio de limpia que se presentó en el municipio y las juntas auxiliares, derivadas de un conflicto de pago del ayuntamiento hacia la empresa concesionaria.
La inconformidad de los vecinos aumentó cuando los montones de basura se acumularon en las esquinas. Fue hasta el lunes 3 de febrero cuando, la recolección fue reactivada comenzando con el primer cuadro de la ciudad.
Ese mismo día, trabajadores de la Dirección de Servicios Urbanos de Tepeaca bloquearon las instalaciones del organismo de limpia como medida de protesta para que sean reinstalados los empleados despedidos en los últimos meses, así como para exigir que Rafael Salmorán Bautista sea reconocido como su dirigente sindical.
Entre sus peticiones, los manifestantes alegan la falta de pagos durante las últimas dos quincenas y exigen que el ayuntamiento les garantice sus puestos de trabajo. Sin embargo, a decir de las autoridades municipales, a ninguno de los manifestantes le adeudan salarios y que los despedidos fueron liquidados con forme a Derecho.
Desde el jueves pasado el municipio de Tlachichuca se quedó sin elementos de seguridad luego de que los uniformados cerraran la comandancia, como medida de presión para que la administración cubra los salarios detenidos desde diciembre del 2013.
Los cinco agentes que conforman la plantilla entregaron sus equipos de radio comunicación al regidor de Gobernación, Luis Gonzalo Balderas Fierro, y señalaron que retornarán a sus labores hasta que tengan una respuesta favorable a su situación laboral.
Para el viernes, en el municipio de Acatlán de Osorio los trabajadores del servicio de limpia suspendieron la recolección y se plantaron frente al palacio municipal llevando consigo montones de basura, tras enterarse de que la administración del edil Lenin Martínez Reyes ya se quedó sin recursos y ya no les pagaría la última quincena.
Los empleados se mantuvieron en espera hasta este lunes, cuando finalmente el edil saliente se comprometió a informar por escrito quién y cuándo se realizaría el pago correspondiente.
Este lunes se dio a conocer que también los vecinos de Cuautlancingo enfrentan el mismo problema, pues desde hace dos semanas les fue suspendido el servicio de limpia, resguardando sus desechos al interior de los domicilios y en otros amontonándolos en las esquinas.
La problemática se percibe con mayor intensidad en los fraccionamientos situados en las calles Tlaxcala y San Isidro, tales como Villas Miro, La Herradura, Villas de Marqués, Villas Dalí, Residencial Bambú, San Joaquín y Hacienda San Joaquín.