Huauchinango, Pue.- El de Cuaxicala es un cerro “fallado”, por eso desde el 2009, cuando hubo un derrame de petróleo por la fractura de la tubería se recomendó a Pemex que la cambiara y trazara otro derecho de vía, “pero no lo hicieron”, aseguró José Mario González, ex funcionario de la Dirección de Protección Civil del estado en la gestión de Mario Marín Torres.

En entrevista telefónica, González dijo que también se sugirió, tanto a la paraestatal como a ICA, que construyeran un sistema de drenes y muros de gavión para aminorar el reblandecimiento del terreno y detener el talud cortado para la construcción de la autopista México-Tuxpan, respectivamente.

“Si ahora no se toman esas medidas, los derrumbes no se van a detener, porque las grietas en la montaña también son internas. Se trata de tierra muy blanda, con una cantidad enorme de mantos freáticos”, afirmó.

Indicó que no se trata de alarmar a nadie, pero “el tiempo nos dio la razón” y recordó que las fracturas registradas en el kilómetro 80+062 del oleoducto Poza Rica-Salamanca, en Septiembre de 2009, se debieron a un asentamiento provocado por las detonaciones de dinamita que ICA hizo para construir un túnel en la base del monte.

El ex empleado detalló que las recomendaciones por parte de quienes estaban en el gobierno estatal se realizaron luego de un peritaje en el que se determinó la profundización de una falla geológica que atraviesa los cerros de Cuaxicala, San Miguel y Tecacalango, detectada en octubre de 1999, tras el paso de la depresión tropical número 11.

“Hicimos muchas reuniones tanto en el punto, como en la Estación Catalina de Pemex en Huauchinango, a las que asistieron ejecutivos de Petróleos, de ICA y funcionarios de Protección Civil del estado y del municipio. Pero a los trabajos no se les dio continuidad. No se siguió con el monitoreo del cerro, aunque fueron colocados testigos para observar el movimiento de la falla”, explicó.

Pero “los ductos siguieron en un terreno fallado que, por la cantidad de agua que cayó el sábado pasado, se reblandeció y presionó a la tubería hasta romperla”, aventuró González para explicar lo que sucedió el fin de semana anterior, durante el paso del huracán Ingrid por la Sierra Norte poblana.

Por ello, agregó, además del necesario cambio de la tubería -pues el oleoducto tiene cerca de 42 años de haber sido colocado en ese lugar-, se requiere construir un sistema de drenes “y no sólo rellenar el terreno”, además de hacer varios muros de gavión y verificar que el talud de la autopista tenga la “pendiente adecuada”.

Resguarda Pemex zona de reparación de ducto

En tanto, a la orilla de la carretera federal México-Tuxpan, en el acceso a la comunidad de San Miguel Acuautla, en Huauchinango, dos decenas de enormes tubos fueron amontonados sobre el derecho de vía, desde donde serán transportados hacia el cerro del Yelotépetl.

Al sitio del derrumbe sólo se permite el libre tránsito a los habitantes de Cuaxicala y a personal de Pemex y de la empresa HF Construcciones S. A. de C. V., que acarrea la tubería. La zona sigue bajo resguardo de la paraestatal, cuyos empleados son alertados por radio sobre la presencia de reporteros, curiosos y “gente ajena” a la comunidad, con el fin de que les restrinjan la circulación.