San Gabriel Chilac, Pue.- En un intento de as alto, fue ultimado a machetazos este miércoles el sacristán del templo de de Guadalupe ubicada en el barrio de Vistahermosa de esta población.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 12:00 horas cuando presuntamente dos sujetos se introdujeron a la capilla con intensión de robarse la coronita y el bastón del Niño Manuel, por lo que rompieron el cristal del nicho en el que se encontraba.

Los hechos fueron descubierto por el hoy occiso, Rubén Isidro Martínez Rosales de 62años de edad, quien intentó impedirlo. Acto seguido, los sujetos pretendieron amarrarlo con cinta canela, mientras lo sometían a machetazos. Las lesiones finalmente terminaron con su vida.

Tras este asesinato, los responsables huyeron llevándose únicamente el juego de llaves de la parroquia.

El cuerpo inerte del sacristán fue descubierto alrededor de las 14:20 horas por sus familiares, luego de que arribaran al lugar para dejarle sus alimentos, por lo que inmediatamente dieron aviso a las autoridades municipales y de seguridad pública.

Al mismo tiempo, lo pobladores empezaron a repicar las campanas del templo y a realizar perifoneo para exigir justicia para el sacristan que llevaba más de 45 años prestando su servicio en este lugar.

En poco tiempo se lograron concentrar más de mil habitantes, quienes con consignas pedían justicia, así como la destitución del alcalde Rigoberto David Martínez Rosas, ante el nulo trabajo que ha realizado para frenar la inseguridad que se ha apoderado del municipio.

Pese a que Peritos y el Fiscal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJ) para realizar las diligencias y el levantamiento del cadáver, los pobladores concentrados en el lugar impidieron el acceso a la capilla y señalaron que no les permitirían realizar su labor hasta que no se presentara el alcalde.

Alcalde afirma tener dos detenidos

El munícipe Rigoberto David Martínez Rosas llegó a este lugar a las 19:30 horas para dialogar con los habitantes y dar paso a que las autoridades ministeriales realizaran su trabajo.

Informó entonces que en los separos de la Policía Municipal se encontraban dos sujetos, posteriormente identificados como Luis Gerardo Gutiérrez y Sergio Pérez, que presuntamente eran los responsables del asesinato de Martínez Rosales. 

Ante la inconformidad que prevalecía entre los habitantes de este municipio, fue necesario que arribaran los delegados de  la Secretaría General de Gobierno en Tehuacán y Ajalpan, Leonel Bustamante Gálvez, así como Jahir Puertos Guzmán, respectivamente.

Los funcionarios estatales pidieron a los manifestantes formar una comisión para trasladarse al palacio municipal, en donde se ubican los separos y de esta manera comprobar que se encontraban los individuos detenidos que señalaba el presidente.

Durante el lapso de tiempo en el que se negociaba la entrada del Ministerio Público a la capilla, no se dejaron de escuchar gritos de consigna en contra de las autoridades por la falta de seguridad, así como la exigencia de justicia, en tanto la madre del hoy occiso, Rosenda Rosales, en repetidas ocasiones pedía ver a su hijo.

Al cierre de esta edición, un grupo de pobladores custodiando prácticamente al alcalde se dirigieron hacia la presidencia municipal para verificar que en verdad la policía municipal tenía detenidos a los presuntos homicidas.