Puebla, Pue.- “Es momento de tener unidad dentro del PRI, por esta razón se tiene que fortalecer al partido con todos los perfiles que han sido parte fundamental del partido”, declaró Néstor Camarillo Medina, al tomar protesta como dirigente provisional del Revolucionario Institucional.

El priista llegó en medio de acusaciones de imposición de él y de su compañera de fórmula, Isabel Merlo Talavera, cuyo nombramiento, acusan algunos priistas, no fue consensuada con los grupos al interior del tricolor. La inconformidad es tal, que algunos priista han manifestado que abandonará las filas del tricolor.

Hay que recordar que el PRI se alista para hacer frente a la elección intermedia del 2021, cuando se elijan diputados federales y locales y se renovarán los Cabildos de los 217 municipios de la entidad.

Elección en la que en números, el PRI llegará más débil que nunca, debido a que en última elección del 2010, fue la ocasión en la que obtuvo menos curules y alcaldías.

En videoconferencia aseguró que es tiempo de cohesión entre los militantes, organizaciones y organismos especializados, la cual tenga que hacer crecer al partido, fortalezca el trabajo y se fortalezca la unidad, para retomar la vida propia del partido.

“Nos integramos en una sola fórmula para estar al frente, mientras esta contingencia sanitaria permanece. A mis compañeros de partido les pedimos, precisamente por esta contingencia, nos permitan transitar de la mejor manera, y siempre contando con la mano extendida, con humildad, pidiéndoles su fortaleza para que nos sepan orientar, para que nos sepan conducir en esa gran unidad, en esa gran conciliación primero, dentro del PRI, y podamos ser una oferta viable para el resto de la sociedad”, dijo.

Camarillo Medina indicó que para la elección del dirigente del PRI, se escucharán todas las voces, a todos los militantes y se atenderán todas las necesidades de la institución para tener un mejor partido.

Fotografía Especial

clh