San Martín Texmelucan, Pue.- Norma Layón, presidenta municipal de San Martín Texmelucan, confirmó en una entrevista en un portal de noticias que un grupo de amigos, realizará los trabajos de remodelación del mercado Domingo Arenas.

La obra se estima tendría un costo de 280 millones de pesos y obedece a un proyecto que, de acuerdo a la propia alcaldesa, es a solicitud de la ciudadanía, con la cual a más de un año no ha logrado generar empatía.

De acuerdo a lo manifestado por la presidenta, el proyecto contempla la realización de 820 locales, para reubicar ahí a los ambulantes que se han apoderado en las calles del municipio, además asegura que los trabajos no tendrán costo para locatarios ya que sus amigos, están dispuestos a invertir en este centro de bastos.

Sin embargo, la alcaldesa se contradice con  lo que dijo en Puebla y ha obligado a sus funcionarios a difundir en grupos de WhatsApp, spots en los que asegura que el mercado no se privatizará, hecho que ha generado malestar entre los comerciantes de este centro de abasto, quiénes pese a solicitarle la entrega del proyecto, no han tenido respuesta de las autoridades.

Incluso en la entrevista Norma Layón Aurun señala que hablo con algunos líderes del mercado como Jesús Astorga, a quien le dio a conocer que no habría privatización del mercado, "y que ahora el propio Astorga ha metido cizaña para evitar que la obra se lleve a cabo.

No obstante, a decir de los locatarios el proyecto no puede llevarse a cabo, ya que además el ayuntamiento no tiene la escritura que avale la propiedad del mercado Domingo Arenas, hecho que en otras ocasiones ha frenado que se inviertan recursos a este centro de comercio, que literalmente se ha convertido en una bomba de tiempo, pues tiene serias deficiencias en la instalación eléctrica y de gas.

Al igual que en el tianguis, donde la recaudación semana a semana no llega ni a los ocho mil pesos, aún cuando hay miles de comerciantes, dentro del mercado existe un sin número de comerciantes que adeudan desde hace varios años el pago por los espacios que ocupan, lo que genera un rezago significativo que bien podría ayudar a mejorar dicho sitio.

Por ahora, la confrontación se mantiene y se prevé se pueda recrudecer si es que la alcaldesa arranca la obra en febrero, tal como lo prometió, pues aún no ha informado a dónde reubicarán a más de mil 800 comerciantes que estarían fuera, cerca de un año, tiempo que se llevará la ejecución de la obra.

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agb