Teziutlán, Pue.- En tan solo nueve días, la boutique “El Balcón”, fue víctima de la delincuencia con dos robos por la noche, siendo un escaparate de cristal, por donde ingresaron los delincuentes y sin prisa, seleccionaron la mercancía, desmontaron los maniquíes y se llevaron dinero en caja, de ahí que, sin otra alternativa, de plano, el aparador fue cerrado con ladrillos.

Hace unos días, para ser exactos, el 31 de mayo, el cristal del mismo aparador fue cortado cuidadosamente por los amantes de lo ajeno. Días después, la Policía Municipal detuvo a un presunto responsable de este delito, quien además tenía en su poder chequeras de la propietaria, pero dos días después de la detención fueron dejados en libertad tras pagar una fianza.

La madrugada del nueve de junio, de nueva cuenta el mismo negocio fue víctima de un robo, contó la propietaria de la boutique, Alejandra Castro Martínez, quien explicó que esta vez, con una pedrada hicieron un hoyo al cristal del mismo aparador y de nueva cuenta por ahí entraron.

“Hicieron su gran selección, el aparador de caballeros, desmantelaron el maniquí con el smokin, se dieron el lujo de poder desmantelar los maniquíes y se llevaron bolsas de dama”, se lamentó la propietaria de esta boutique con 25 años de servicio y que dijo que es un fuerte golpe a la inversión que realizan en prendas de marcas reconocidas y cuyo robo representa una gran pérdida que difícilmente podrán recuperar.

Ante esta situación, el aparador desapareció y ahora existe una pared para evitar que de nuevo entre la delincuencia. Tampoco descartan reforzar con protecciones. “tuvimos que tomar medidas drásticas”.

Para la propietaria de esta conocida boutique ubicada en pleno centro de Teziutlán, “es una burla” que apenas a unos días que fueron robados y puesto en libertad el presunto responsable, de nuevo sean víctimas de la delincuencia, “por lo pronto desaparece ese aparador”, apuntó.

La carpeta de investigación se integró por el delito de robo calificado y ya se realizan las investigaciones correspondientes, pero debido a que de enero a el día de hoy, suman ya tres robos cuantificados en más de 400 mil pesos y ante la impotencia de no detener estos delitos, la propietaria Alejandro Castro rompió el silencio en un intento de frenar la delincuencia.