Acatlán de Osorio, Pue.- Desde el miércoles 29 de agosto que ocurrió el linchamiento de dos hombres en Acatlán de Osorio, el presidente municipal Guillermo Martínez Rodríguez, además de los regidores, no se han presentado en las instalaciones del ayuntamiento, ni asistieron el domingo a la colocación del bando patrio.

En el palacio municipal sólo labora personal de limpieza y secretarias, por lo que se presume que el tradicional Grito de Independencia podría suspenderse ante los hechos violentos registrados hace una semana.

Aunque los medios de comunicación han buscado a las autoridades municipales para hablar sobre el ajusticiamiento de los dos campesinos, nadie sabe dónde se encuentran.

En su momento el secretario General de Gobierno, Diódoro Carrasco Altamirano, reconoció que el edil, los regidores y cinco policías, se encontraban bajo proceso de investigación por el linchamiento.

Y es que el munícipe habría incumplido con el artículo sexto del protocolo que indica que las autoridades municipales deberán informar "inmediatamente" a la Secretaría General de Gobierno cuando haya un intento de linchamiento, y que solicitará la intervención de la Secretaría de Seguridad pública y de la Fiscalía General del Estado para garantizar la integridad de las personas y la seguridad de los habitantes.

Familiares sin apoyo

En tanto, familiares de los fallecidos aún no han tenido ningún encuentro ni apoyo por parte de autoridades municipales ni estatales y se mantienen a la espera de saber quién cubrirá los gastos funerarios y la quema de su vehículo.