Jalpan, Pue.- Más de una decena de pozos y arroyos que desembocan en el río San Marcos han sido contaminados por un “constante” derrame de gasolina que se registra desde noviembre pasado en el ducto Poza Rica-Salamanca a la altura de los poblados de La Cuchilla en Jalpan y El Tepetate, en Xicotepec, ante la negligencia de personal del Sector Catalina de Pemex que a la fecha se ha negado a reparar la tubería y remediar los daños, denunciaron afectados.

El agua de estas afluentes sirven para el consumo humano, ya que abastecen a los habitantes de ambas comunidades y también sirve a algunos ranchos ganaderos cercanos como El Torreón, propiedad de Alfonso de Vega García, donde ya han muerto 10 reses que han consumido el líquido, mientras otros, como los familiares del diputado José Esquitín Lastiri han optado por sacar su ganado del lugar, como medida preventiva.

Desde hace cinco meses, indicó el ganadero, un fuerte olor a hidrocarburo los alertó a él y a sus vecinos de la posible existencia de una fuga en el gasoducto de 18 pulgadas, por lo que reportaron los hechos ante Protección Civil del municipio de Jalpan “que no hizo nada” y luego a la empresa Petróleos Mexicanos a través de un teléfono con lada 241 –de Tlaxcala- que está pintado en la tubería.

Como no les hicieron caso, en enero de 2017 acudieron ante el Superintendente del Sector Catalina de PEMEX, Ángel Gutiérrez Segura, quien se comprometió a dar mantenimiento al gasoducto y a remediar los daños que ha causado el derrame en el área, pero a la fecha no ha cumplido el compromiso.

“Mandan una pequeña pipa, succiona unos 4 o 5 mil litros de agua. Se la llevan. Dicen que la van analizar para determinar la calidad del agua y saber qué es lo que tienen que hacer. Hemos firmado algunas minutas para las reparaciones, pero no cumplen y la contaminación sigue”, refirió De Vega.

A la fecha, al productor se le han muerto 10 reses por la ingesta de agua contaminada. “El hidrocarburo acaba con la flora rumial de los vacunos y les provoca la muerte”, explicó al tiempo de mostrar fotografías de las vísceras de los animales.

Pemex incluso hizo la autopsia a las reses, agregó. “Llevaron a un veterinario para verificar las causas de la muerte y luego, la empresa se comprometió a reparar los daños y a dar mantenimiento al gasoducto”, pero hasta ahora no lo han hecho.

Aunque desconoce la cantidad de combustible que se ha derramado, De Vega García señaló que ya presentó una denuncia ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para que inicie un procedimiento contra Petróleos Mexicanos (Pemex) por la contaminación de los manantiales y arroyos, y está a la espera de una respuesta de la dependencia de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Además, espera que Pemex cumpla con las obras de remediación en las áreas contaminadas porque se supone que realizó los muestreos necesarios para la limpieza de los cuerpos de agua y pidió la intervención de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).