México.- El Palmeiras logró el pase a los cuartos de final del Mundial de Clubes FIFA 2025 tras vencer al Botafogo por 1-0. Fue un partido muy igualado, que necesitó de una prórroga para dirimir un ganador. Finalmente, una acción genial de Paulinho decantó la balanza en favor del Verdao.

El primer partido de octavos de final del Mundial de Clubes FIFA 2025 deparó un duelo completamente brasileño. Una circunstancia que tuvo mucho que ver con el desarrollo del partido. Palmeiras y Botafogo son dos equipos que se conocen a la perfección; y ninguno de los dos estaba dispuesto a ceder ni un centímetro al rival. El resultado fue un choque muy competido, también duro. Sobre todo, cuando el balón llegaba a la línea de tres cuartos en cualquiera de las dos mitades.

Inicialmente, Palmeiras reclamó el balón y Botafogo accedió a ello. A lo largo del torneo, el equipo blanquinegro ha demostrado encontrarse muy cómodo defendiendo en bloque bajo. Una táctica que volvió a repetir en octavos de final. Durante los primeros 45 minutos le funcionó muy bien, pues apenas sucedió nada reseñable. El balón se movió fundamentalmente por zonas fuera de peligro y, cuando el Verdao colgaba algún centro al área, los defensas de la Estrela Solitaria lo achicaban sin problemas. Solo un duro disparo desde fuera del área de Richard Rios pareció poder romper la muralla carioca, aunque golpeó la red superior por el exterior.

El partido cambió en la segunda parte, eso sí. Sobre todo, a raíz de la explosión de Estevao. El joven extremo brasileño es una de las grandes atracciones del torneo y en los octavos de final justificó el hype existente en torno a su figura. Jugando por su banda natural, Messinho se echó a su equipo a las espaldas y dinamitó el encuentro. Lo intentó desde fuera del área en dos ocasiones, también buscando en profundidad a Vitor Roque. Aunque el encuentro se volvió más alegre y Palmeiras parecía más cerca del gol, la igualada permaneció en el marcador. Curiosamente, en el 64’, Abel Ferreira decidió prescindir de su dúo de ataque. Entraron Luigi y Paulinho en su lugar. Este último sería decisivo en la prórroga.

Claro que para eso aún quedaba un mundo. Hasta entonces el portero John Victor fue el mejor jugador del Botafogo en el encuentro. Su figura se agrandó en el 73', cuando despejó a córner un remate de cabeza de Mauricio dentro del área. Para entonces, Palmeiras seguía atacando insistentemente. Quizá con menos magia, eso sí.

Al menos hasta la jugada clave del encuentro. En el minuto 100', Paulinho recibió el balón en el perfil diestro y, en diagonal, encargó hacia la portería. Le salieron al paso dos defensas, a los que recortó con su pierna derecha. Acto seguido, como si hubiese detenido el tiempo, armó el disparo con la izquierda. El tiro fue ajustadísimo al palo largo, lejos de la manopla de John Victor. Un auténtico golazo. Palmeiras terminó con 10 jugadores tras la expulsión de Gustavo Gómez en el 116', aunque no importó. El Verdao es equipo de cuartos de final, mientras que Botafogo termina aquí su participación.

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Foto @Palmeiras

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