Puebla, Pue.- En medio de un contexto marcado por la violencia, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, condenó los recientes homicidios de dos adolescentes, Reyes Pajarito Hernández en Coronango y Johan Ramírez Hernández en Huejotzingo. Durante la misa dominical celebrada en la Basílica Catedral Metropolitana, ofreció una oración especial por los desaparecidos en Puebla y en todo el país.

El líder de la Iglesia poblana exhortó a la ciudadanía a no permanecer indiferente ante la inseguridad que afecta a miles de familias. En su mensaje, hizo un llamado a recuperar el sentido de comunidad y a solidarizarse especialmente con quienes han perdido a sus seres queridos o los siguen buscando.

Particularmente, dedicó palabras de aliento a las madres y padres que todos los días salen en busca de sus hijas e hijos desaparecidos. Señaló que la unión y la fraternidad son pilares fundamentales para revertir la ola de violencia que golpea al país.

En el marco de la celebración por el 99 aniversario de la Juventud Católica Mexicana (JCM), pidió a sus integrantes convertirse en agentes de cambio. Invitó a los jóvenes a ser ejemplo de paz y armonía dentro de sus hogares, escuelas y comunidades.

Finalmente, lamentó que la inseguridad se haya convertido en un flagelo que afecta a todas las familias, y reiteró que los jóvenes pueden desempeñar un papel clave en la construcción de un México más justo y pacífico.

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Foto: Especial

cdch