The Economist puso en duda la lucha del gobierno de Andrés Manuel López Obrador en contra de la corrupción; para ello recordó la red de tráfico de influencias de sus hijos y los negocios que han hecho con su administración.

En su editorial del jueves, el diario británico recordó el caso de la “Casa Gris” en el cual está involucrado José Ramón López Beltrán.

“Una investigación muestra que el tercer hijo de López Obrador, Gonzalo López Beltrán, dirigió una red de contratistas que vendieron materiales a sobrecosto para el Tren Maya, uno de los proyectos preferidos de su padre. En 2022 se dio a conocer que su hijo mayor, José Ramón, vivía en una casa de lujo en Houston, propiedad de un contratista de Pemex. Tanto el presidente como su familia han rechazado que haya algo ilegal en estos casos”, señaló.

En ese sentido, también expuso el descalfo millonario en la Agencia de Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) y los señalamientos que aseguran alrededor del 80 por ciento de los contratos públicos que se otorgaron de manera directa.

“Estudios muestra que 86% de los mexicanos dice que los actos de corrupción del gobierno son frecuentes. El mayor caso de desvío de recursos por parte de una institución pública, el de Segalmex, en el que funcionarios desviaron cerca de 15 mil millones de pesos, ocurrió en su gobierno”, expuso.

Por otro lado, hizo referencia a la investigación publicada por el medio estadounidense ProPublica en torno al presunto financiamiento del Cártel de Sinaloa a su campaña presidencial de 2006.

“El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha criticado la corrupción por mucho tiempo. Pero el 30 de enero un grupo de medios reportaron que en 2006 su equipo de campaña aceptó dos millones de dólares de pandillas de la droga a cambio de favores. Los reportes, basados en información de la DEA, no muestran que el presidente supiera lo que ocurría. Pero una persona cercana sí, afirman. El señor López Obrador rechaza por completo estas afirmaciones, llamándolos calumniadores”, dice.

Por último, The Economist analizó el impacto de estas circunstancias en la carrera presidencial.

En ese sentido, afirmó que las aspiraciones presidenciales de Claudia Sheinbaum, precandidata presidencial de Morena, se verán lastimadas por los señalamientos de corrupción del gobierno de Andrés Manuel.

“Algunos desdeñan la credibilidad de las acusaciones que rodean la campaña de 2006 del señor López Obrador. Las atribuyen a las artimañas políticas previas a las elecciones de junio. Aunque no puede competir de nuevo, herirlo a él también podría lastimar a su favorita para sucederlo, Claudia Sheinbaum, del partido gobernante, Morena”, apuntó.

La Otra Opinión

Foto: Especial

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