Huauchinango, Pue.- A pesar del deslave que dejó tres muertos en la colonia Nuevo Monterrey en Huauchinango, una familia fue acusada de promover la venta en esos terrenos irregulares.  

Tras aceptar la asesoría jurídica del ayuntamiento, habitantes de la colonia Nuevo Monterrey, donde un alud mató a tres menores de edad en septiembre pasado, solicitaron a la administración municipal de Huauchinango que advierta a las personas sobre los riesgos de adquirir terrenos en zonas de riesgo y pidieron que se actúe contra los fraccionadores.

Entrevistado tras la reunión que sostuvo con unas 10 familias que habitan el área irregular, el alcalde Gabriel Alvarado Lorenzo indicó que desde la madrugada del 25 de septiembre se ha mantenido en comunicación tanto con la familia damnificada, como con otros colonos que habitan la zona vulnerable y se comprometió a impedir la construcción de viviendas en lugares que carezcan de un dictamen aprobatorio de la Dirección de Protección Civil.

En tanto, los colonos denunciaron que “la familia de Albino Santos –quien hizo este fraccionamiento- sigue promoviendo la venta de terrenos” en este asentamiento irregular, muy cerca incluso de la ladera donde se produjo el deslave que destruyó la vivienda y enlutó a la familia Cruz Meneses.

Respecto a esta familia damnificada,  el presidente municipal indicó que se le ofreció proporcionarle materiales de construcción para una casa que, inicialmente iba a ser edificada en un terreno propiedad de la hermana de Joel Cruz Hernández, pero se descartó esa posibilidad debido a que el lote no está en un lugar propicio para resguardar su integridad.

Sin embargo, agregó, se les ha entregado ropa y alimentos, además de hacerle diversas ofertas de trabajo para que pueda sostener a sus hijos y esposa.

Tanto a la familia de Joel Cruz, como a las demás que están en riesgo en la colonia Nuevo Monterrey, se les ha invitado a regresar al albergue que se habilitó en el Palacio del Deporte y se continúa con el monitoreo de la zona donde están sus casas.