Huauchinango, Pue. – El párroco de Huauchinango, Gustavo Alejandro Sentíes Corona, pidió una disculpa pública a los niños que padecen autismo y a las mamás de ellos, por las molestias que representan los estruendos de los cohetes de vara que se han estado ocupando durante la fiesta patronal de Jesús en su Santo Entierro. 

El titular de la Parroquia Santa María la Asunción, atendió el llamado de la organización “Moms Huauchinango” en donde se agrupan mujeres, en su mayoría mamás que se solidarizaron con las denominadas “familias azules” que así se identifican las familias en donde hay integrantes con autismo. 

Una comisión de “Moms Huauchinango” inició un activismo durante esta semana, en el marco de las actividades con las que se celebra la fiesta al santo patrón, Jesús en su Santo Entierro, dado que se ha destacado por los fuertes estruendos que se escuchan de los cohetes de vara que se lanzan y estallan en las alturas. 

Las mamás que tienen hijos menores con autismo atestiguaron que es una verdadera crisis la que viven sus hijos y el resto de la familia al ver sufrir a los niños, porque al padecer autismo, los hace más sensibles a los ruidos, más aún que por la fiesta, lo mismo se detonan los artefactos a cualquier hora del día, sin embargo, lo que más genera daño, son los estruendos por la madrugada. 

Las activistas se acercaron a las autoridades municipales y también enviaron mensajes al párroco, Gustavo Alejandro Sentíes Corona, para que considerara la petición de disminuir el número de cohetes utilizados en las festividades. 

En una de las eucaristías de este 17 de marzo, el líder religioso atendió el mensaje de las mamás, por lo que pidió disculpas por las molestias que han causado los estallidos de la pirotecnia y llamó a los encargados de lanzar los cohetes a que tengan más cuidado. 

Se comprometió a que se utilizarían los artefactos explosivos, sólo al terminar la misa de la mañana, al mediodía y en la misa de las 19:00 horas, además se mostró sorprendido de la fuerza con la que truenan “estos cohetes, no sé por qué”, se preguntó y recalcó que serían más cuidadosos. 

Mediante las redes sociales, la agrupación Moms Huauchinango agradecieron el gesto del párroco, y calificaron el hecho como una atención “amorosa (…) seguimos creyendo que el diálogo, la sensibilidad y la empatía son pieza clave para generar buenas acciones, gracias a la comunidad, a los medios y a toda la gente que se ha unido y se ha solidarizado con las familias azules”. 

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