Atlixco, Pue.- Decenas de ciudadanos atlixquenses reconocieron el esfuerzo de una agente vial, quien a pesar de la intensa lluvia de las últimas horas no se movió de su lugar para agilizar el tráfico en pleno centro de Atlixco, ya inundado por la cantidad de agua caída.

La admiración para Norma N., una mujer con varios años de antigüedad en esa dependencia, fue simbólica porque no se otorgó ningun estímulo ni galardón físico.

Ella laboraba en uno de los cruceros más importantes de la mancha urbana, cuando cayó el diluvio, y en lugar de buscar un refugio, siguió desempeñando sus funciones.

Minutos después, dijo un testigo, las corrientes comenzaron a inundar ese tramo y los autos particulares y en consecuencia a detenerse.

“De momento fue un caos y la agente decidió no moverse, ante la sorpresa de los transeúntes y de los choferes, para evitar accidentes”, comentó un atlixquense.

A diferencia de otros colegas, señaló uno de sus compañeros, prefirió quedarse en su puesto de trabajo y cumplir con las responsabilidades.

En cada precipitación pluvial, esa parte de la ciudad, a unos cuantos pasos del zócalo, queda convertida en un auténtico caos por la cantidad de agua y el tráfico mayor.

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agb