Entregan 890 propuestas de plazas en el IMSS, pero sin la intervención del líder sindical Sergio Herrera
Entre el lunes y jueves de esta semana se les han entregado a 897 personas su propuesta autorizada para que ocupen una plaza en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Puebla, dentro de todas las categorías laborales que hay en el organismo federal. Lo que podría ser visto como un proceso laboral convencional no lo es, por el contrario, es un hecho inédito por dos razones: los beneficiarios no tuvieron que pagar un soborno para que su solicitud fuera admitida y se excluyó, por primera vez, a los miembros de la sección 1 del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS), encabezada por Sergio Herrera Vázquez.
De esa manera se frenó de tajo un jugoso negocio que se hacía con la venta de las propuestas de trabajo, que para el caso de Puebla se estaban ofreciendo entre 60 mil y hasta en 100 mil pesos por cada una de estas autorizaciones.
Es decir, se frustró un mercado ilegal de venta de plazas en el Seguro Social que, de a acuerdo a cálculos conservadores, podría haber dejado ganancias de entre 27 y 45 millones de pesos, si se parte de la idea de que únicamente se hubiera pedido pagos ilegales en la mitad de los puestos de trabajo que se ofrecieron.
O de haberse exigido sobornos en todos los puestos laborales en juego, el monto de beneficios económicos podría haber rozado entre los 50 y los 90 millones de pesos.
La autorización de las propuestas de trabajo –en esta ocasión– corrió a cargo directamente de la Secretaría de Admisiones y Cambio del Comité Ejecutivo Nacional del SNTSS, haciendo a un lado a la dirigencia local del sindicato, pero sin perder el derecho que tiene la representación gremial de designar a los aspirantes de ocupar las vacantes en las áreas médicas, de enfermería, de trabajo social, intendencia y personal administrativo del Seguro Social.
El cambio se derivó del siguiente conflicto:
En la segunda semana de junio pasado, se realizó el 46 Congreso Seccional Ordinario del SNTSS en Puebla, que en esta ocasión tuvo una composición muy especial: de los 200 delegados que acudieron al encuentro y formaron parte de la asamblea general del sindicato, 169 participantes surgieron de las corrientes opositoras al grupo político de Sergio Herrera Vázquez, el secretario general del sindicato del IMSS en el estado.
Ello fue un reflejo de la pérdida de liderazgo de la actual dirigencia local del organismo gremial del Seguro Social.
Durante el Congreso, el 64 por ciento de los delegados rechazaron aprobar el informe financiero del sindicato.
Y cuando se preparaban, se organizaban, los delegados para exigir la salida de Sergio Herrero y los demás integrantes de la dirigencia local, se apareció en el evento el líder nacional del SNTSS, Arturo Olivares Cerda, quien al parecer ya intuía que habría este escenario de rebelión y por esa razón, seguía el desarrollo del congreso en un lugar cercano en donde sesionaban los miembros de la asamblea general.
Olivares Cerda escuchó las quejas de los delegados y prometió una auditoría a la gestión de Sergio Herrera.
La auditoría se llevó acabo y se elaboró un pliego de observaciones, que el parecer, está en proceso de ser solventado.
Dicen los enterados que en el congreso ordinario del SNTSS, las dos quejas más fuertes, las más recurrentes, de los delegados que expresaron ante Olivares Cerda los agravios sufridos en el sindicato, fueron: la venta de las propuestas de trabajo y que, por esa misma razón, los hijos de los agremiados del sindicato han sido desplazados en la posibilidad de laborar en el Seguro Social, de solicitar ocupar las vacantes laborales.
Las mismas fuentes dicen que el dirigente nacional Arturo Olivares Cerda habría tomado la decisión salomónica de solucionar el clima de malestar en la sección 1 del SNTSS de dos maneras:
Primera: dejar en su cargo Sergio Herrera Vázquez, a quien le quedan escasos dos años al frente del sindicato.
Segunda: no permitió la destitución de nadie, pero tampoco dejó que los miembros de la dirigencia local del sindicato se “sirvan con la cuchara grande” mediante la venta, de manera discrecional, de las propuestas para ocupar los puestos de trabajo vacantes.
Con ello, dejó felices a las dos partes: a los dirigentes sindicales y a los opositores. Bueno, eso es lo que perece.
clh
Anteriores
