Insurgentes en la Sierra Norte de Puebla, héroes olvidados

A doscientos años de la consumación de la Independencia de México, se conserva poca información testimonial de los actores comunes que contribuyeron a las grandes causas nacionales, quedando sus nombres y hechos en la mayoría de los casos, olvidados en las páginas del tiempo.

Señaló lo anterior y aportó algunos nombres y sucesos de la época, Luis Eduardo Torres Molina, Licenciado en Relaciones Internacionales por la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), estudiante de la Maestría en Administración de Empresas y Presidente de la Sociedad de Defensores de la República Mexicana y sus Descendientes,

Indicó que regiones del Estado de Puebla, como la Sierra Norte de Puebla que en ese tiempo incluía los Llanos de Apan y era conocida durante la Independencia como el Departamento del Norte, era una zona económica y estratégicamente para la administración virreinal.

Luego de iniciado el movimiento encabezado por Miguel Hidalgo, hubo personas y grupos pequeños que aisladamente se integraron a las partidas militares que operaban en la región y donde algunas poblaciones como Zacatlán, se sumaron a la lucha armada.

En agosto de 1811 el Jefe de los insurgentes en el Departamento del Norte era José Mariano Aldama, sobrino de Juan Aldama quien antes de finalizar ese año, fue asesinado en una hacienda de la región, cuando huía de la persecución del realista Ciriaco del Llano.

Su lugar sería ocupado por un líder de la región, José Francisco Osorno, quien fue sustituido el 13 de junio de 1814 por Ignacio Rayón, mantuvo la dirigencia real del movimiento en la zona hasta fin de 1816, cuando tras la ejecución de José María Morelos y Pavón, además de la embestida del realista Manuel de la Concha, junto con la mayoría de sus colaboradores se acogieron a un indulto.

Desde los primeros años de la lucha insurgente, hubo personas en la región que brindaron su apoyo a la causa independentista, como el Párroco de Tetela, José Antonio Martínez de Segura llamado el Tatita Cura, quién aportó grandes sumas de dinero en sostener las divisiones de José Francisco Osorno el líder regional.

También participó el fraile agustino Francisco Bonilla, quien administraba una hacienda de la región y a menudo viajaba disfrazado a Zacatlán llevando cartas y otros efectos a los insurgentes.

Además, hubo personajes que aportaron suministros, como el Capitán José Mariano Méndez, padre del General Juan Nepomuceno Méndez Sánchez y otros, que además contribuyeron a la lucha armada, como el Capitán Juan Nepomuceno Bonilla, padre del Coronel Republicano Vicente Antonio Bonilla Segura.

De acuerdo a la señora Victoriana Segura, esposa del Capitán Bonilla, constató para la posteridad en un documento la siguiente frase: “Esta es la medalla que ganó mi Sr. Juan N(epomuceno) Bonilla, por la Yndependencia de Méjico, peleando al lado de (José Francisco) Osorno y Dn. José Ma. Morelos (y Pavón), hasta el triunfo del Sr. Dn. Agustín de Yturbide en 1821, es mi deseo que mis hijos la conserven (sic)”.

Torres Molina conserva a la fecha, la medalla y el escrito de la condecoración otorgada por Agustín de Iturbide a Juan Nepomuceno Bonilla, por sus contribuciones a la Independencia de México.

Relató que después de la firma de los Tratados de Córdoba el 24 de agosto de 1821 y la consumación de la Independencia por medio de la firma del Acta de Independencia del Imperio Mexicano el 28 de septiembre de 1821, el Reino de España no abandonó totalmente la idea de recuperar México.

En un último intento por reconquistar a la joven nación, el 3 de abril de 1822, entró el batallón español de Zaragoza a la entonces Villa de Zacapoaxtla, abrieron fuego y mataron a tres vecinos que pertenecían a la guardia de la cárcel, según narra el Coronel Antonio Carrión en 1897.

Los zacapoaxtecos se organizaron y salieron con rumbo a Tlatlauquitepec y se tiene el testimonio del Coronel Republicano Manuel Molina, hijo del Capitán Insurgente José Molina, quienes en abril de 1822 capturaron a los últimos gachupines y fueron llevados a Puebla.

No se cuentan con registros sobre los fallecimientos de los militares insurgentes Juan Nepomuceno Bonilla, José Molina y del Párroco José Antonio Martínez de Segura. Por otro lado, se sabe que el 20 de marzo de 1824, en medio de serias dificultades económicas, murió en la hacienda de Tecoyuca, Chignahuapan, el Brigadier José Francisco Osorno.

Finalmente, a manera de reflexión indicó que, en estos tiempos de retos, es preciso reflexionar sobre el legado que pretendían dejar aquellos a las generaciones venideras, sobre los deberes y responsabilidades que como ciudadanos tenemos frente a los desafíos del país y del mundo globalizado de hoy en día, buscando siempre contribuir a la solución de los problemas, para la construcción de una sociedad más justa, equitativa, culta y pacífica.

Las referencias históricas señaladas son del Archivo Histórico Privado de la Familia Molina Bonilla, el Acervo Histórico de la Sociedad de Defensores de la República Mexicana y sus Descendientes Asociación Civil, de los investigadores e historiadores Venancio Aguilar-Patlán, Carlos María de Bustamante, Antonio Carrión, Virginia Guedea y Ramón Kuri Camacho.

Medalla de la Independencia de México otorgada al Capitán Insurgente Juan Nepomuceno Bonilla. Foto propiedad del Acervo Histórico de la Sociedad de Defensores de la República Mexicana y sus Descendientes.

Texto de la señora Victoriana Segura a sus hijos sobre la medalla de su esposo Juan Nepomuceno Bonilla. Foto propiedad del Acervo Histórico de la Sociedad de Defensores de la República Mexicana y sus Descendientes.

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Leticia Montagner

Leticia Montagner es licenciada en Periodismo y tiene la maestría en Periodismo Político por la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Doctorada en Derecho y Género. Fue catedrática de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla y de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Es pionera en Puebla de noticiarios y programas radiofónicos con perspectiva de género desde 1997. Conductora de programas de radio y televisión en Puebla. Actualmente es catedrática de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, escribe una columna política los miércoles en El Sol de Puebla y conduce la Revista ABC en ABC Radio 1280 de AM.